Nicolás Romero, México- Desde su
fundación, hace 45 años en Tecomatlán, Puebla, el Movimiento Antorchista
trabaja día y noche para llevar bienestar y progreso a las comunidades más
pobres del país. Luchamos incansablemente para que la enorme riqueza que genera
se reparta equitativamente entre todos los mexicanos, luchamos para que se
respeten los derechos establecidos en la Constitución, como son el derecho a la
alimentación, a la vivienda, a la educación y a la salud, aseguró Héctor Javier
Álvarez Ortiz, al anunciar que próximamente se inaugurará el reencarpetado del
3er. Callejón de Juárez, que beneficiará a más de 200 familias de Nicolás
Romero.
Esta obra, dijo el dirigente antorchista
en la zona noroeste del Estado de México, ha sido posible gracias a la gente
conciente que nos respalda y que se suma al proyecto de Nación que impulsa la
organización para cambiar el actual modelo económico que tiene sumidos en la
pobreza a más de 100 millones de mexicanos, por uno más justo y equitativo, y
que consiste en cuatro puntos básicos: empleo para todos; mejores salarios; una
carga fiscal más justa, donde paguen más impuestos los que ganan más; y la
reorientación del gasto social, donde se destine mayor presupuesto a las
comunidades más pobres.
El líder social agregó que para Antorcha
es un gran orgullo trabajar de la mano de la ciudadanía para mejorar las
condiciones de vida de la gente más humilde: “Nuestros activistas visitan sus
comunidades para concientizar a la ciudadanía, además de ayudarlos en sus
gestiones ante los gobiernos para solicitar obras y servicios”.
Como botón de muestra, señaló, en el
último año, el Movimiento Antorchista ha gestionado para beneficio de los
habitantes de las colonias Juárez y Vistahermosa, obras como la pavimentación
del andador Puebla y la entrega gratuita de mil 400 pares de calzado para los
alumnos de la escuela Club de Leones y de la Telesecundaria Nicolás Romero.
Álvarez Ortiz invitó a todos los vecinos
de la colonia Juárez a sumarse de manera más activa al proyecto de la
organización, pues dijo, sólo creciendo de manera exponencial se podrá
conquistar el poder político y cambiar el modelo económico por uno más justo,
donde todos tengamos una vivienda digna, educación y servicios de salud de
calidad, así como un empleo bien remunerado, que alcance para cubrir las
necesidades básicas pero esto sólo será posible trabajando de manera organizada
y fraterna.
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