Un
extensor de red puede ser la gran solución al clásico problema técnico
que por lo regular tienen la mayoría de los hogares: el
Internet no llega bien a todas las habitaciones.
Por: Gustavo Calderón, Director Regional de Ventas de Belkin y Linksys
¿Tú
sabes qué es un punto ciego? Quizás lo desconoces, pero seguro lo has
sufrido. Son esos lugares de nuestra casa donde por más que hacemos no
llega bien la señal
WiFi de nuestro módem. Un clásico ejemplo: tenemos un hijo adolescente,
que tiene su recámara al final del corredor, y el módem está en la
sala; él usa de forma intensa su Xbox, YouTube y, de vez en cuando,
películas en streaming, pero nos odia porque nunca
le llega bien la señal de Internet. A veces le interrumpe su juego o
sus videos y sus películas se detienen en el clímax. Esa recámara, claro
está, no tiene una buena cobertura inalámbrica. En cualquier otra
habitación la señal WiFi llega con consistencia,
pero por alguna razón ésta no llega bien a la de nuestro hijo que anda
con cambios de humor.
Este
problema también se nota cuando, por ejemplo, al estar haciendo una
llamada por WhatsApp, la voz se interrumpe o se oye entrecortada o
robotizada. Eso quiere
decir que estamos pasando por una zona sin cobertura inalámbrica. En
esas situaciones uno suele probar de todo, como cambiar el módem o
router de lugar, tratar de ubicarlo en un punto estratégico para que
todos en casa tengan una buena señal, pero no siempre
surte efecto. A veces influye la arquitectura de la casa, la
distribución de ésta, los materiales con que están hechas las paredes y
puertas, si es de un piso o dos, etcétera.
En
estos casos, la recomendación usual es contar con un extensor de red,
porque puede ser la respuesta que uno necesita para amplificar la señal
WiFi en nuestra casa
y que ésta llegue bien a todas las habitaciones, lo cual hará que la
familia toda nos siga queriendo.
Un
extensor de red es un dispositivo que repite la señal del módem, por
eso algunos le dicen “repetidor”. Su función, como su nombre lo dice, es
tomar la señal del
módem o router y retransmitirla, con el fin de ampliar la cobertura de
éste. Otra manera de ver lo anterior es como una carrera de relevos. El
primer corredor, el módem o router, lleva la señal hasta donde se
encuentra el extensor de red, y de ahí, éste segundo
corredor -el repetidor de señal- lleva el encargo, tu valioso Internet,
hasta los puntos donde tienes una señal WiFi pobre o inexistente.
Sin
embargo, no se trata solo de comprar el extensor de red. Hay que saber
dónde ubicarlo, para lo cual tendrás que leer el manual de tu nuevo
dispositivo, o bien,
pedir asesoría telefónica, que es fundamental si de verdad quieres
resolver de una vez por todas este problema de tu red casera.
Por
ejemplo, “el amigo de un amigo”, después de comprar su flamante
extensor de red, llegó a su casa y pensó que era buena idea instalarlo
en el baño, porque justo
está a la mitad de su departamento y porque en el pasillo que divide
las recámaras no existía ningún contacto de luz, por lo cual no pudo
instalarlo ahí. El resultado fue que el dispositivo funcionó a medias,
llegó bien a algunos lugares, antes puntos ciegos,
pero en otros lados la señal siguió siendo débil. Es decir, el problema
se solucionó parcialmente, por lo cual en estos casos sería conveniente
hablar con su electricista de confianza para instalar una nueva toma de
corriente eléctrica.
Otro
aspecto que es necesario resaltar es que, una vez instalado el
repetidor o extensor de red, se deberán habilitar los dispositivos para
que éstos se alimenten
también de esa señal inalámbrica, porque no es algo que suceda en
automático. De otra manera, tu dispositivo WiFi permanecerá conectado al
módem o router hasta que se cambie de forma manual al extensor de red,
incluso si éste está ubicado más cerca del dispositivo
que el mismo router.
¿Cómo lo instalo y en dónde?
El
extensor de red es fácil de instalar, casi es de “saque de la caja y
conéctese”. Tan solo se conecta a la luz eléctrica y se presiona el
botón WPS en el router
y listo, ya el dispositivo estará en condiciones de hacer llegar la
señal WiFi a donde te estaba fallando anteriormente.
Sobre
la ubicación, la recomendación general es colocar el extensor justo
donde la cobertura inalámbrica todavía es robusta -para que el repetidor
tome bien la señal-,
pero no deberá estar muy cerca del router, pues de otra forma, no
obtendrás ninguna mejora en la señal, el alcance será limitado. Prueba
distintas ubicaciones de tu repetidor para obtener la conexión deseada.
Evita
interferencias u obstáculos evidentes, como paredes de cemento, objetos
de metal y microondas, entre otros factores. Las puertas, en teoría, no
deberían ser
problema, a menos que tengas una puerta de metal tipo banco.
Muchos
extensores de red vienen con software para solucionar las dudas sobre
el mejor lugar para instalar tu repetidor de señal. Nuestros extensores
de red Linksys
brindan la tecnología exclusiva Spot Finder
con la que
encontrarás la ubicación perfecta de instalación del equipo. Compatible
con tu smartphone, laptop o tableta, Spot Finder proporciona una única
representación visual de lo lejos o cerca que está extensor con respecto
al router o módem. La instalación en tres
pasos garantiza que tendrás la máxima señal Wi-Fi en los rincones más
lejanos de casa, tanto en dentro como fuera. Además, de que son
universales, lo que los hace sencillos de instalar pues funcionan con
routers o módems de cualquier proveedor de servicio.
Ahora que estamos en cuarentena por el coronavirus, lo podrás leer en
Internet antes de poner la mercancía en tu carrito.
El router y tu extensor deben ser como un buen matrimonio
Por
lo regular, los extensores de red suelen ser una gran solución a los
problemas de cobertura WiFi, siempre y cuando se ajusten bien a las
especificaciones técnicas
del router. No sobra decir que, aunque el repetidor de señal funcione
bien y tenga muchas funcionalidades, éste no mejorará la capacidad del
router.
En
otras palabras, y ya para concluir, si tu extensor es muy bueno, con la
última tecnología y demás, te servirá de poco si tienes un router
antiguo. En el mismo
sentido, si tu router es de última generación y funciona a frecuencias
altas, deberás adquirir un extensor que esté a la altura y tenga los
mismos estándares WiFi. Por eso decimos que el router y el extensor son
como un buen matrimonio: deben tener las mismas
aspiraciones y capacidades si quieren tener una buena relación a largo
plazo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario