• Verificar el estado de los adornos navideños y usar retardantes de fuego en el árbol navideño pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte.
• Realizan talleres para prevenir quemaduras, alcanzando una meta de 4 mil beneficiados directos, mediante la Campaña Nacional de Prevención de Quemaduras No TQMES, de la Fundación Michou y Mau.
• Ocurren quemaduras por adornos navideños principalmente en niños entre dos y cinco años.
Toluca, Estado de México, 23 de diciembre de 2018. “Para disfrutar de una navidad sin amargura deberán extremarse las precauciones en el uso de fuegos artificiales, siempre bajo la supervisión de los adultos, además de inspeccionar el cableado eléctrico de los adornos navideños colocados en los hogares para evitar una tragedia”, puntualizó Anneliese Vilchis Otto, Directora de Prevención de Fundación Michou y Mau, IAP.
Esta institución, legalmente constituida ante la Junta de Asistencia Privada del Estado de México (JAPEM), organismo sectorizado a la Secretaría de Desarrollo Social estatal, tiene la finalidad de brindar asistencia a niños quemados, quienes son canalizados a centros especializados para que reciban el mejor tratamiento posible, así como promover la cultura preventiva sobre el riesgo de quemaduras.
Ante los riesgos de sufrir un incidente durante la época decembrina, la fundación hace un llamado a los padres de familia para que bajo ninguna circunstancia, tanto niñas, niños y adolescentes manipulen fuegos artificiales. En caso de que sea imprescindible encender cohetes y luces de bengala, deberá ser bajo supervisión de los adultos.
Por otro lado, es indispensable examinar que las instalaciones y cables de los adornos navideños estén en buen estado, evitar recargar la toma eléctrica y no encender fuego cerca de material de fácil combustión.
“Aunque las quemaduras por adornos navideños ocurren principalmente a niños entre dos y cinco años de edad, los adolescentes se encuentran en riesgo por manejo inadecuado de fuegos artificiales y encendido de fogatas sin control”, puntualizó Anneliese Vilchis Otto.
Cabe destacar que durante este año, la fundación realizó la canalización de 72 pacientes al Hospital Shriners, en Galveston, Texas, dos a Sacramento, siete traslados nacionales, 50 referencias en México y 413 atenciones locales para recibir tratamiento.
Además, realizó 11 talleres de prevención, alcanzando una meta de 4 mil beneficiados directos, mediante la Campaña Nacional de Prevención de Quemaduras No TQMES, aparte de mantener una campaña permanente en medios de comunicación para crear conciencia sobre las secuelas de las quemaduras y las necesidades de los pacientes quemados.
Durante la impartición de los talleres, se enfatizaron las medidas preventivas a implementar, tales como no dormir con calentadores prendidos, alejarlos de muebles o materiales flamables como colchones, cobijas y cortinas, o dejar ventilado el espacio en donde se duerme, por el tema de monóxido de carbono, que puede acabar con la vida de los habitantes.
Asimismo, se hace referencia al cuidado que se debe de tener con los líquidos hirvientes: “no hay que ponerlos a enfriar en el piso ni mucho menos transportarlos en vehículos si están calientes, ya que el 80 por ciento de las quemaduras son causadas por ello”.
Por una navidad libre de niños quemados, Fundación Michou y Mau, IAP, invita a ser responsables con el uso de fuegos artificiales y adornos decembrinos.
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