Por más elaboradas que sean nuestras rutinas de skincare, la verdad es que una piel sana comienza en la cocina. El Día Mundial de la Alimentación (16 de octubre) nos invita a reflexionar sobre lo que comemos y también sobre cómo eso se refleja en nuestra piel. ¿Sabías que los cítricos no solo son una fuente poderosa de vitamina C, sino que también pueden influir en el equilibrio de la microbiota cutánea?
La vitamina C es reconocida por su acción antioxidante, su capacidad para estimular la síntesis de colágeno y proteger la piel del daño ambiental. Consumir frutas como la naranja, la toronja o el limón no solo fortalece el sistema inmunológico, también apoya la salud de la piel desde adentro. Además, se ha descubierto que una dieta rica en antioxidantes favorece la diversidad microbiana de la piel, lo que se traduce en una barrera cutánea más fuerte, menos irritaciones y un cutis más luminoso.
Y como el cuidado también viene de afuera hacia adentro, sumar tópicos con vitamina C o ingredientes fermentados puede potenciar estos efectos. Algunos productos como la mascarilla facial de vitamina C de Skïn Sense, ayudan a iluminar y unificar el tono de la piel, mientras que sus toallitas desmaquillantes con extractos fermentados son ideales para mantener la piel limpia sin alterar su equilibrio natural.
Receta glow para tu piel
Dale a tu piel un boost de frescura con este smoothie rico en betacarotenos, vitamina C y antioxidantes:
Ingredientes:
1 taza de jugo de naranja natural
1 zanahoria mediana pelada y picada
1/2 taza de mango congelado
Jugo de medio limón
1 cucharadita de jengibre rallado
1/2 taza de agua o hielo al gusto
Licúa todo hasta obtener una mezcla homogénea. Disfrútalo en ayunas o como snack de media mañana.
Comer saludable, hidratarte correctamente y elegir fórmulas respetuosas con tu microbiota cutánea son pasos sencillos que, con constancia, se notan. Porque al final, alimentar bien tu cuerpo es también la mejor manera de alimentar tu piel.
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