Organismo actualizó sus proyecciones de actividad económica para la región.
(11 de abril, 2019)
La
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) actualizó
sus proyecciones de crecimiento de la actividad económica para los
países
de la región durante 2019 y rebajó levemente su estimación para el
promedio regional a un 1,3%, comparado con el 1,7% previsto en diciembre
2018 cuando la institución lanzó su informe anual
Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2018.
La
nueva estimación para 2019 -informada hoy mediante un comunicado de
prensa- está influida por el complejo escenario externo y las dinámicas
domésticas
que se han venido observando en los países de la región. Al igual que
en años anteriores, la CEPAL proyecta una dinámica de crecimiento cuya
intensidad es distinta entre países y subregiones, y que responde no
solo a los impactos diferenciados del contexto
internacional en cada economía, sino también al comportamiento de los
componentes del gasto —principalmente el consumo y la inversión—que han
venido siguiendo patrones distintos en las economías del norte y del
sur.
Según
la CEPAL, la actividad económica en América del Sur pasará de un
crecimiento de 0,5% en 2018 a 1,1% en 2019. Por su parte, Centroamérica
crecerá
un 3,1% en 2019, con revisiones leves a la baja en la mayoría de
países. Esto es consecuencia de la mayor desaceleración esperada para
Estados Unidos este año, que afecta no solo al comercio sino también a
las remesas que se dirigen hacia esta subregión, entre
otros factores.
La
CEPAL agrega que para Centroamérica, México, Republica Dominicana,
Haití y Cuba el crecimiento será de 2,0%. En tanto, las economías del
Caribe de habla
inglesa y holandesa mostrarán también un crecimiento del 2,0% este año
2019, cercano al pronosticado en diciembre.
De
acuerdo con el organismo, los principales riesgos para el desempeño
económico de la región de cara al 2019 sigue siendo una menor tasa de
crecimiento
global, el bajo dinamismo del comercio mundial, y las condiciones
financieras que enfrentan las economías emergentes. Por otra parte, la
guerra comercial entre Estados Unidos y China aún no se ha resuelto, lo
que supone un riesgo no solo para el comercio
global y la tasa de crecimiento del mundo a mediano plazo, sino también
para las propias condiciones financieras que suelen estar vinculadas a
la percepción de mayor o menor riesgo por parte de los agentes.
En
tanto, los precios de las materias primas también pueden verse
impactados negativamente por un aumento de las restricciones
comerciales, agrega la CEPAL.
Hasta el momento, se prevé para 2019 un leve descenso en el nivel de
precios promedio de los productos básicos (de -5%), siendo los productos
energéticos los que presentarían la mayor baja (-12%). Pero dado un
empeoramiento mayor al esperado del nivel de actividad
mundial y del comercio mundial, esta proyección podría revisarse a la
baja.
Además
de lo anterior, al igual que en los últimos años sigue presente la
preocupación por la evolución de la economía de China: se espera que en
2019
nuevamente desacelere, a un 6,2% de crecimiento. Finalmente, están los
habituales riesgos geopolíticos, a los que se agregan las incertidumbres
todavía vigentes respecto de ciertos procesos con importancia no solo
geopolítica sino también económica a nivel
global, como el Brexit.
Más información:
No hay comentarios:
Publicar un comentario