·
Existen diferentes enfermedades,
tanto físicas como psicológicas, que se desarrollan por el uso excesivo de
diferentes tecnologías.
Ciudad
de México, 21 de noviembre de 2019. Cifras
de IAB México y Kantar Insights, revelan que en el país el 46% de las personas advierten
que sus dispositivos móviles son tan importantes e indispensables que si los
olvidan se regresarían a casa a recogerlos. Este problema ya está en atención
del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el cual advierte que la
nomofobia (trastorno de adicción al teléfono celular) puede generar desde
malestares en articulaciones, ojos, huesos, oídos, insomnio, depresión y
ansiedad.
El uso excesivo de internet, celulares
inteligentes y redes sociales, entre otros, ha dado como resultado que
diferentes padecimientos físicos y sicológicos se vuelvan más complejos de
tratar. En esa línea, la ciberpsicología ha sido una herramienta que ha brindado
importantes pautas para tratarlos. Al respecto, la Dra. Arantxa Duque,
Directora del Grado en Psicología de La Universidad Internacional de Valencia (VIU), destacó: “han emergido nuevas patologías a
consecuencia del uso intensivo de dispositivos, por ejemplo, el phubbing o el
miedo a ser excluido de las redes sociales denominado ‘Phomo’. La ciberpsicología
ahora aparece como un campo de estudio emergente a nivel global, que se hace
cada día más necesario”.
Duque,
agregó que es importante considerar a la ciberpsicología como la atención
psicológica que cubre la interacción con tecnologías, además como el estudio de
nuevas patologías y trastornos condicionados por tecnologías interconectadas, donde
también es relevante destacar que no existe una definición operativa concreta.
De hecho, no hay unanimidad en la comunidad científica internacional a la hora
de considerar las ciberadicciones como una enfermedad.
La
ansiedad, depresión, diferentes fobias (con realidad virtual y tecnologías) y la
adicción al tabaco están entre los problemas más frecuentes que se desprenden
del abuso en el uso de la tecnología. El Reino Unido se ha convertido en un
país pionero en esto y la salud pública ofrece atención y tratamiento, pero mediado
-curiosamente- por las mismas tecnologías, disponiendo de una serie de datos que
ofrecen un rigor científico que puede aumentar la eficacia de los tratamientos y
extender la implementación de tácticas derivadas de la ciberpsicología.
Para
abordar estos problemas, ha resultado vital el desarrollo de la inteligencia
artificial, la cual está facilitando la optimización de la atención psicológica
en diferentes trastornos, pero se requieren de mayores estudios que aporten
conocimiento de los diferentes tipos de problemas, con el fin de ser abordados y
utilizar la información de manera correcta, dando los mejores resultados. Si bien la ansiedad, depresión o fobias ya cuentan con análisis
extensos, hay que seguir profundizando en un campo que apenas inicia a
explorarse.
“Es
claro que la adicción a la tecnología -por su naturaleza en sí- no se debe
tratar prohibiéndolos o programando los dispositivos para que se desconecten al
ser usados por un paciente, ya que es una sociedad interconectada y eso sería
mantener al margen a una persona, lo que puede considerarse un nuevo tipo de exclusión
social y es mejor trabajar en un proceso más allá de esa estrategia”,
aseveró la Directora del Grado en Psicología.
Por
lo anterior, y en vista que nos enfrentamos a la cuarta revolución industrial,
invadida de nuevas tecnologías de la información, es relevante la formación en
ciberpsicología, para adquirir competencias que contribuyan al desarrollo de 3
aspectos clave: profesionalidad, ética y seguridad. En esta línea, desde el
Grado de Psicología de la Universidad Internacional de Valencia, se promueve
esta formación desde la investigación en los trabajos de fin de grado y
organiza e imparte un ciclo de masterclass sobre esta misma temática a cargo
de Marta de la Torre, experta y coautora de la primera Guía para la
Intervención Telepsicológica en España.
Siempre es mejor prevenir
Sin
duda una de las principales tareas de la ciberpsicología es encontrar la manera
de evitar los trastornos psicológicos y psicopatológicos, donde los expertos deben
centrarse en la manera de crear y promulgar las buenas prácticas del uso de las
Tecnologías de la Comunicación e Información (TIC). En esa línea, la salud
pública deberá fortalecer estrategias integrales encaminadas a la prevención y,
en segunda instancia, atención de pacientes que puedan sufrir los trastornos
asociados al uso de la tecnología.
Ahora,
no menos importante, están los daños físicos que se derivan de este problema,
por ejemplo, el denominado síndrome del cuello roto (Neuralgia occipital) que se
ocasiona por una mala postura al usar celulares y tablets, por lo general. Otro
de los más comunes es la tendinitis, ya que al utilizar demasiado tiempo el
celular o las tabletas entre las manos trae consecuencias, además puede
producir rigidez y dolor en los dedos o manos.
El
insomnio por gastar horas conectado y no dormir de manera adecuada, trae consecuencias
físicas que se trasladan a los diferentes sistemas del cuerpo, donde algunos
expertos detallan que se pueden afectar parte de los mecanismos cerebrales. Para
finalizar, están los daños en los ojos, ya que al usar de manera incorrecta los
dispositivos y por lapsos largos, la vista se esfuerza con resultados negativos,
los cuales se empiezan a notar en el mediano y largo plazo.
Sobre la
Universidad Internacional de Valencia:
La
Universidad Internacional de Valencia es una de las principales universidades
online del mundo hispanohablante. Cuenta con más de 12.000 alumnos de 72
nacionalidades diferentes, un profesorado con más de 1000 docentes que en su
mayoría, combinan su actividad profesional con la académica, y más de 3300
convenios para prácticas y colaboraciones. La Universidad Internacional de
Valencia forma parte de Planeta Formación y Universidades, una de las redes
internacionales de instituciones educativas más importantes del mundo, con más
de 100.000 estudiantes de más de 114 nacionalidades, y presente en Europa,
América y norte de África. www.universidadviu.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario