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Hoy se celebra el “Día Mundial del
Suelo”; demandan técnicos y científicos crear la Comisión Nacional del Suelo
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Alrededor de 140 millones de
hectáreas padecen degradación y esto se refleja en disminución de la
productividad, en pobreza y dependencia alimentaria
El 5 de
diciembre ha sido designado por la Organización de Naciones Unidas, como “Día
Mundial del Suelo”, frente al proceso progresivo de degradación y el
desplazamiento de los suelos por efecto del uso intensivo en la agricultura y
ganadería, y la acción de la erosión por vientos y escurrimientos de agua, sin
que hasta ahora se aplique una política gubernamental de protección y recuperación
de suelos en nuestro país.
Durante una
ceremonia conmemorativa del “Día Mundial del Suelo”, en la explanada del Senado
de la República y ante la presencia del senador José Narro Céspedes, el
investigador del Colegio de Postgraduados, Manuel Anaya Garduño, señaló la
necesidad de revertir los procesos de degradación del suelo, “lo cual es urgente
e inaplazable; cada día que pasa, aumentan las hectáreas de suelo degradadas y
disminuye nuestra capacidad de producir alimentos”, dijo.
Señaló que crece la carencia de alimentos en las entidades
federativas, municipios y localidades. Es necesario garantizar a nivel de
política económica, social, cultural y ecológica, la articulación del combate a
la degradación del suelo, como estrategia de desarrollo estatal, municipal y comunitario,
que permita avanzar en el logro gradual de un desarrollo sustentable.
Destacó que investigadores tanto del Colegio de Postgraduados
como de las Universidades de Chapingo, Antonio Narro y de otras instituciones
académicas están vivamente interesados en la creación de la Comisión Nacional
del Suelo, en virtud de la dispersión de acciones del gobierno sin resultados
palpables después de más de cinco décadas de erosión progresiva de tierras
agrícolas, forestales y ganaderas.
Precisó que siete estados concentran el 50 por ciento del
valor de la producción agrícola nacional y todos presentan procesos de
degradación de suelos: Sinaloa (degradación química), Michoacán (erosión
hídrica), Veracruz (degradación física), Jalisco (erosión hídrica), Sonora
(erosión hídrica), Chihuahua (erosión eólica, y Chiapas (degradación química).
Esto indica la urgente necesidad de establecer medidas preventivas y
correctivas de conservación del suelo.
Por su parte, la doctora Laura Bertha Reyes Sánchez, secretaria
general de la Sociedad Latinoamericana de la Ciencia del Suelo y académica de
la UNAM, parafraseó que “sin maíz no hay país….”. “Pero sin suelo, no hay maíz
ni país”.
Consideró que la cuarta transformación de México, “requiere
de insertarse y trabajar en conjunto con la Alianza Mundial por el Suelo”, de
la FAO, y también en los “Objetivos del Desarrollo Sostenible, de la ONU, así
como en el “Código Internacional de Conducta para el uso y Manejo de
Fertilizantes, de la FAO.
La degradación del suelo afecta la estabilidad y
sustentabilidad de la producción de alimentos y genera hambre y pobreza, por lo
que se requiere impulsar la educación, la concientización ciudadana y la
gobernanza de los recursos agua y suelo, a fin de lograr los objetivos del desarrollo
sostenible
Señaló la doctora Reyes Sánchez que existen firmes esperanzas
del pueblo mexicano en la llamada Cuarta Transformación y en la prometida
recuperación del campo mexicano. Estas esperanzas aún son mayores de parte de
edafólogos e ingenieros agrónomos de México, para que, a través de la
Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, así como de la Cámara de
Diputados y del Senado de la República, incluyan en sus agendas de trabajo la
recuperación de los suelos en todo el territorio mexicano.
La migración masiva dentro y fuera del país, desintegra el
núcleo familias y es una consecuencia importante de la degradación de los
recursos naturales. Señaló que México requiere de una Ley del Suelo para su
debida protección y los edafólogos de México lo reclamamos ante el nuevo
gobierno de Andrés Manuel López obrador.
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