● Consulta pública del IFT busca validar la flexibilización de medidas de América Móvil.
● Dicho agente no debe contar con libertad tarifaria mientras siga siendo preponderante.
● IFT debe revisar las consecuencias negativas de bajar la guardia en materia regulatoria.
México, D.F., a 18 de marzo de 2021. –
El pasado 16 de marzo, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT)
abrió un proceso de consulta pública que, en los hechos, tiene por
objeto validar la decisión adoptada por el regulador desde el pasado mes
de diciembre en el sentido de aligerar algunas restricciones a las que
se encuentra sujeto el Agente Económico Preponderante en
Telecomunicaciones (AEP-T).
Para
los integrantes del Instituto de Derecho de las Telecomunicaciones
(IDET) resulta alarmante que sea el propio órgano responsable de imponer
al AEP-T las medidas asimétricas necesarias para evitar que se afecte
la competencia y libre concurrencia en el sector de telecomunicaciones,
el que opte por flexibilizar algunas de esas medidas, en franco
beneficio de América Móvil y, en clara contravención a lo dispuesto en
la reforma constitucional de telecomunicaciones de 2013 y en la Ley
Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión.
El
IFT sabe que la figura de preponderancia es constitucionalmente
distinta a la de mercado relevante y que la intención del Constituyente
Permanente es que aquella no pueda diluirse en consideración a mercados
específicos, ya sea por servicio o por cobertura geográfica. Antes de la
reforma de 2013, el ahora AEP-T fue exitoso al cabildear con los
reguladores la determinación de cada mercado para evadir la regulación y
al litigar en tribunales la delimitación de cada uno de ellos. Por eso
la preponderancia abarca al sector telecomunicaciones como un todo
indivisible a nivel nacional.
Por
otra parte, es de llamar la atención la celeridad con la que el IFT
busca permitir que el AEP-T goce de plena libertad para fijar las
tarifas del servicio de acceso indirecto al bucle local en algunas zonas
geográficas, tomando en cuenta que ni siquiera han entrado en vigor
otras obligaciones derivadas de la Segunda Revisión Bienal de las
Medidas Asimétricas de Preponderancia concluida apenas el pasado mes de
diciembre, momento en el que el regulador aprobó para sí mismo, la
facultad de concederle al AEP-T algo inconcebible, el contar con
libertad tarifaria, a pesar de mantener su carácter de preponderante al
seguir acumulando alrededor del 60% de participación de mercado de todo
el sector telecomunicaciones.
Resulta
altamente desconcertante para el IDET que en la actualidad se perciba
que en el órgano regulador gana terreno un enfoque laxo o generoso
respecto a la importancia de mantener las diversas obligaciones
asimétricas y los principios regulatorios previstos no sólo por el IFT,
sino por la Constitución y la Ley Federal de Telecomunicaciones y
Radiodifusión, frente a un enfoque que demuestre una clara preocupación
por consolidar la competencia en un sector telecomunicaciones en el que
existe aún un alto nivel de concentración en manos del mismo agente
económico que ha dominado de manera evidente el sector desde 1997 cuando
se dio la apertura a la competencia.
Es
incomprensible que haya quienes dentro del IFT piensen que porque en
determinados mercados locales se ha observado una disminución en la
concentración de algún servicio específico, se puede pensar ya en
liberar al AEP-T de la carga que debe diseñarse siempre para dicho
agente como un todo y en todos sus mercados
.
De
haberse adoptado en otros tiempos, este tipo de enfoque regulatorio sin
sustento y generoso con el agente más poderoso en los albores de la
apertura a la competencia en el mercado de larga distancia en nuestro
país, cuando se sabía que había una competencia intensa en los mercados
locales de la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, los pocos
logros que a nivel nacional se pudieron obtener hubieran desaparecido
mucho más rápido que lo que se observó en aquellos años, en los que si
nadie dentro del IFT recuerda, vale la pena señalárselos: el operador
dominante terminó por recuperar gran parte del terreno que había cedido a
la competencia, en buena medida por la actitud permisiva del regulador
de entonces.
Es
por todo ello que el IDET, de manera respetuosa exhorta a los
comisionados del IFT y demás funcionarios de ese órgano regulador a que
no hagan a un lado la historia regulatoria de nuestro país, así como que
revisen cuáles han sido las consecuencias en otros períodos de haber
bajado la guardia o haber pensado que la competencia en México ya era
suficiente.
Acerca del IDET
El
Instituto de Derecho de las Telecomunicaciones (IDET) es una asociación
civil mexicana, constituida en julio del 2002, con fines estrictamente
académicos, de investigación y propositivos, integrado por un grupo de
especialistas del sector de las telecomunicaciones y de las tecnologías
de la información, que contribuyen al perfeccionamiento del marco
regulatorio existente.
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