Prepara ballet Báalam Óok’ot bailes de Oaxaca

Nicolás Romero, Méx- Uno de los grupos culturales más importantes del noroeste mexiquense, el ballet Báalam Óok’ot, está preparando un número que incluye dos piezas de baile regional provenientes del estado de Oaxaca: ‘La danza de la pluma’ y la ‘danza de los Chilolos’. El encargado de colaborar con el montaje de dichos bailes es el maestro Hilario Herrera Santiago, proveniente de aquella entidad.

Herrera Santiago compartió un poco sobre el significado de estas piezas dancísticas. “La danza de la pluma representa a dos grandes bandos; uno a Hernán Cortés y otro a los indígenas. También están representadas La Malinche y la Española, donde se aprecia el proceso de mezclas entre ambas culturas y expresa, a través del baile, el proceso histórico de la conquista. Es una pieza de alta complejidad por lo que se requiere mucho orden y disciplina”.

Respecto a la danza de los Chilolos, también conocida como danza apache, el maestro indicó, “en ésta se representa una boda en la cual hay varios personajes como el viejo, que es el papá de la novia, la esposa del viejo, el macho, quien se roba a la novia porque supuestamente, en esta representación la novia ya está comprometida y a pesar de que existe un novio y una novia, no se casan y, prácticamente, la boda es entre el macho y la novia, quien ya estaba enamorada de él”.

Desde su perspectiva, el maestro considera que se hace una crítica a las clases sociales. “Pienso que existe, metafóricamente hablando, una representación de las clases sociales, a través del baile nos mofamos de ellas con un estilo muy singular y propio de la comunidad, porque al final siempre se impone el ingenio de un personaje en particular, que por lo regular es aquel que mayor carencia material tiene, lo cual le lleva a ser más creativo para conseguir sus objetivos”.

Héctor Javier Álvarez Ortiz, dirigente del Movimiento Antorchista del noroeste del Estado de México, indicó que es importante que los jóvenes que integran a este grupo cultural cuenten con experiencias de este tipo, pues los nutren en cuanto a su desarrollo como integrantes del ballet y, además, les ofrece un conocimiento sobre algo nuevo que transmitirán a través de sus exhibiciones.