Luego
de que el Tratado
Comercial entre Estados Unidos, México-Canadá ha llegado a su fase de
conclusión, la Confederación Patronal de la República Mexicana
(Coparmex) se congratula con el equipo negociador mexicano, con quien
desde el Cuarto de Junto se mantuvo cerca y trabajó de
manera intensa.
Si
bien aún falta la aprobación
del texto por el siguiente Congreso estadunidense en el 2019, así como
la aprobación por nuevo Congreso mexicano y el de Canadá durante un año
de elecciones federales, hemos sido testigos y partícipes del intenso
diálogo que se ha dado por parte de los equipos
negociadores y los avances que estamos seguros traerán un gran
beneficio para la economía regional, particularmente para el mercado
mexicano.
Para COPARMEX los avances
obtenidos con esta negociación son contundentes para la integración regional de América del Norte y el libre comercio.
Desde nuestra perspectiva,
consideramos los siguientes puntos como avances significativos en este cierre de negociaciones:
Ante
la amenaza de EE.UU.
de desaparecer les mecanismos de solución de controversias del Tratado
en su totalidad, nuestro gobierno negociador hizo un esfuerzo para
preservar el mecanismo de controversia Estado-Estado, capítulo 20, que
permanece inalterado con respecto al NAFTA original.
En
el capítulo 11, se preservan
todos los esquemas de solución de controversias en los sectores más
importantes para las inversiones que recibe México dentro de los flujos
internacionales.
Se
logró conservar el capítulo
19, a pesar de que el gobierno de Estados Unidos buscaba eliminarlo por
completo, la pugna de nuestros socios canadienses y de nuestro equipo
negociador por mantenerlo rindió frutos. Se logró bajar de la mesa la
amenaza de casos contra investigaciones dumping
o de subsidios, para productos agrícolas frescos, algo que se llegó a
nombrar como un Concepto de Estacionalidad. Esta pretensión se eliminó
en su totalidad.
Asimismo,
nuestros negociadores
lograron conservar nuestra capacidad de defensa frente a acciones
discrecionales bajo el mecanismo de Exclusión de Salvaguardas Globales.
Ese mismo mecanismo permitió a México defenderse de tarifas impuestas
bajo la sección 232, con el argumento de seguridad
nacional, como fue el caso en el acero y aluminio.
Se
logró eliminar la llamada
cláusula de extinción, y sustituirla por un mecanismo de revisión de
impacto sexenal –con un desfase respecto a periodos presidenciales en
cualquiera de los países involucrados- y que incluya una renovación del
Tratado cada 16 años.
En
materia energética, se
reprodujeron los principios constitucionales mandatados por el
Legislativo mexicano, manteniendo la soberanía del sector energético y
la propiedad de los mexicanos de los recursos de este mismo sector.
La
inclusión netamente favorable
de un capítulo sobre pequeñas, medianas y microempresas, mecanismos de
cooperación, mecanismos de intercambio de mejores prácticas, mecanismos
para desarrollar incubadoras y aceleradoras de emprendedores y de PyMES.
Otro
avance en el Tratado
es la inclusión de temas de naturaleza progresista, como lo es un
capítulo laboral y otro ambiental que forman parte integral del Tratado,
y son sujetos a los mismos mecanismos de solución de controversias
contenidos en el mismo instrumento, por lo tanto estarán
sujetos a las mismas sanciones comerciales. Estos capítulos buscan que
México cumpla con los compromisos laborales y ambientales existentes,
tanto de la Organización Internacional del Trabajo, como en materia
ambiental internacional.
También
se incluye un capítulo
Anticorrupción, que rebasa los estándares alcanzados en el Tratado del
Pacífico y que es uno de los más ambiciosos que se tienen en cualquier
convenio internacional, también sujeto a solución de controversias y
sanciones comerciales. COPARMEX jugó un papel
clave en impulsar un capítulo anticorrupción robusto, que incluye entre
sus cláusulas la tipificación de diversos delitos como el
enriquecimiento ilícito y la malversación de fondos. Se incluyen también
programas de
compliance y códigos de ética para empresas, así como temas de cooperación entre autoridades de los tres países al respecto.
Coparmex
reconoce el trabajo
y experiencia del equipo negociador mexicano para llevar a buen puerto
las propuestas, exigencias y preocupaciones frente al reto que implica
contar con un Tratado Comercial de cara al desarrollo y los nuevos retos
económicos para nuestro país. En los siguientes
días se publicarán los textos con los acuerdos alcanzados en la
negociación, mismos que analizaremos a detalle para dar una opinión
conclusiva de los temas de interés para nuestro país.