A
la opinión pública:
Medical
Marijuana Inc. y su subsidiaria HempMeds México celebran la decisión
de las autoridades mexicanas para asegurar un marco regulatorio que
establezca con claridad las atribuciones y alcances que las empresas
deben vigilar al buscar la producción, venta o distribución de
productos derivados de cannabis para fines terapéuticos.
Cabe
destacar que la revocación de permisos anunciada el 27 de marzo por
las autoridades sanitarias, no representa una afectación a la
compañía pues, de acuerdo a lo dispuesto por la autoridad, ésta
será para aquellos productos que contengan ingredientes psicoactivos
como el THC, el cual se obtiene de la mariguana, mientras que todos
los productos de la compañía son derivados de cáñamo, y además,
contamos con procesos de producción que nos permiten asegurar que
nuestros productos no cuenten con rastros de ingredientes prohibidos,
como los componentes psicoactivos, y sólo ofrezcan los beneficios de
cannabinoides como el cannabidiol (CBD), el cuál ha sido considerado
por la Organización Mundial de la Salud como una sustancia no
peligrosa y que cuenta con alto potencial terapéutico.
Confiamos
en que las autoridades realizarán, de manera pronta, la revisión
completa de los expedientes presentados en noviembre de 2018, y
realizaran una regulación que pueda dar certeza jurídica a los
industriales, además de promover acceso a este tipo de productos
para que millones de personas puedan disfrutar de los beneficios que
tiene el CBD.
Es
por este medio que instamos a que, en las próximas semanas, las
autoridades cumplan con su labor de proteger la salud de las
personas, permitiendo el acceso a productos seguros, eficientes como
el CBD, que ha demostrado no representar riesgos a la salud pública
en términos de adicciones, pero si cuentan con un alto potencial
terapéutico, además de promover la investigación científica sobre
el cannabis y sus derivados y tomar en cuenta el artículo 245
fracción V para que aquellos productos con amplios usos industriales
puedan ser contemplados, además de ofrecer certeza jurídica para
que los empresarios puedan colaborar en la venta y distribución de
suplementos alimenticios, medicamentos, cosméticos e incluso
productos con otros fines industriales como la industria textil y de
la construcción, haciendo énfasis en la diferenciación de
productos de cáñamo y marihuana, así como de las substancias
psicotrópicas y no psicotrópicas..
