• Acompaña Orquesta Sinfónica Mexiquense presentación del ballet.
• Es “Corazón mexiquense. Las 5 etnias” espectáculo que reunió a más de 80 bailarines en escena.
Ciudad de México, 30 de abril de 2018. El Palacio de
Bellas Artes recibió al Ballet Folclórico del Estado de México, que
presentó el espectáculo “Corazón mexiquense. Las 5 etnias”, acompañado
de la Orquesta Sinfónica Mexiquense (OSM).
El evento inició con la OSM y los “Sones de Mariachi”, de Blas Galindo;
posteriormente el cuadro “La fiesta”, que narra una historia basada en
el juego mexicano de la lotería, cantada por un pícaro indígena,
Virginio, y la muerte vestida elegantemente de charro, que, por medio de
cada una de las cartas, da pie a la presentación de danzas
prehispánicas, bailes típicos de los diferentes estados de la República
mexicana, hasta danza contemporánea y aérea, acompañados por mapping.
La leyenda de los volcanes, El Sol y la Luna y Xipe, dejaron ver la
tradición prehispánica; después tocó el turno a los bailables de
Yucatán, Guerrero, Oaxaca y Veracruz, con su ya famoso zapateado junto
con el “Danzón No. 2”, de Arturo Márquez, interpretado por la OSM.
Canciones típicas como La Iguana, Sandunga, Jarabe Tapatío, Son de la
Negra, Cabeza de cochino y Zopilote, entre otras, se sintieron en el
recinto, que también fue testigo de los vestuarios elaborados de manera
artesanal que muestran la riqueza cultural de las distintas regiones del
país.
Para cerrar la noche, el Estado de México tuvo un lugar especial en la
presentación con las “Xilas de Temascalcingo”, compuesta por tres
piezas: La bruja, Charros y Virginias (Chimalhuacán), espectáculo que
mostró la riqueza natural con la que cuenta el estado con una
coreografía dedicada a la mariposa monarca.
Le siguieron los bailes del sur mexiquense con La Loba y Las abejeñas,
así como Zacazonapan, con toda la alegría de los carnavales.
Finalmente, la bandera de México ondeó al fondo y los vestidos verde,
blanco y rojo salieron al escenario, junto con las notas de la OSM
tocando el Huapango, de José Pablo Moncayo.
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