Por: Marcelo Fondacaro, COO de VeriTran
Desde
hace varios años la tecnología ha cobrado cada día más relevancia como
medio principal para nuestra interacción con el entorno. Sin embargo,
así como le ha abierto la puerta
a tantas facilidades y comodidades, también ha aumentado el riesgo de
robo de datos y fraudes informáticos para las empresas. Esto significa
consecuencias cada vez más costosas y destructivas, generando no solo la
pérdida de credibilidad y daño a la reputación
de las instituciones sino también un impacto financiero bastante alto
como resultado de la filtración de datos en cada cibercrimen.
Según
un informe de Kaspersky, en 2019 se registraron 45 intentos de ataques
informáticos por segundo en America Latina, lo que representa pérdidas
millonarias para el sector financiero
mundial. Además, solo en México, y durante la primera mitad de 2019,
fueron reportados 40 mil 928 robos de identidad cibernéticos y
tradicionales, 23.5% más, con respecto al mismo periodo del año
anterior, reportó la Comisión Nacional para la Protección y
Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef). Esto sitúa
a nuestro país en el octavo lugar mundial en este delito1, el único país de Latinoamérica que aparece en el conteo de las 10 naciones con mayor robo de identidad en el mundo2.
Es
claro que, a pesar de los esfuerzos existentes para proteger el acceso a
la información y datos personales, la seguridad en el mundo digital
continúa siendo un área vulnerable.
Actualmente las contraseñas ya no son garantía y es imperativo que
busquemos nuevos métodos de protección de datos que reduzcan los riesgos
que corren los clientes al momento de entregar información a su entidad
bancaria de preferencia.
Ahora,
si bien no existe un mecanismo que garantice 100% la disminución del
riesgo al crimen cibernético, sí se ha comprobado que la multiplicidad
de mecanismos de seguridad informática
puede aumentar en gran parte las probabilidades de combatir estas
situaciones y la capacidad de las empresas de poder brindarles a sus
clientes mayor seguridad y confianza en el desarrollo de sus
transacciones diarias.
Una
combinación entre la biometría y la tokenización, por ejemplo, es una
de las soluciones que continúa ganando terreno en el mercado de la
seguridad informática.
Un dúo dinámico de seguridad bancaria
Los
sistemas biométricos son un conjunto de tecnologías digitales que
utilizan rasgos físicos de las personas como un medio de autenticación.
La
tokenización, hace referencia a aquel mecanismo mediante el cual se
reemplazan los datos y la información más sensible del titular de una
tarjeta o medio de pago, por un token aleatorio
que cambiará constantemente siempre que el usuario decida realizar una
transacción.
Antes,
al momento de realizar cualquier movimiento, los bancos solicitaban a
sus clientes, una contraseña y/o el número de tarjeta. Sin embargo,
estos procesos de autenticación
han sido cada vez más vulnerados. En ese sentido, las instituciones
financieras se han visto frente al reto de implementar nuevos recursos
de seguridad que aprovechen los avances tecnológicos para integrar
innovación a sus procesos, como lo son los sistemas
de reconocimiento facial, de voz o de huella dactilar, combinados con
un segundo factor de identificación como lo es la tokenización, que
hacen más seguras las transacciones bancarias.
La
incorporación de este tipo de soluciones biométricas y de tokenización
permite que el usuario no tenga que recordar contraseñas y facilita que
la información esté
siempre protegida de cualquier ataque cibernético por suplantación de
identidad, al tener la certeza de que siempre se emitirá un número de
identificación diferente al que solo se tiene acceso a través del token.
La combinación de herramientas que exijan y
verifiquen la autenticidad del usuario, se posicionan entonces como una
de las soluciones más eficientes y funcionales.
Sería
poco realista afirmar que este es el fin de los crímenes cibernéticos.
Sin embargo, la evolución de tecnologías como las anteriormente
mencionadas y la capacidad de combinación
que se puede realizar entre ambas, elevan en gran medida el nivel de
confianza y tranquilidad que le pueden brindar las compañías bancarias a
sus clientes, en una era donde los procesos digitales han cobrado
completo protagonismo en la vida de cualquier persona.
Acerca de VeriTran
VeriTran
es una compañía
global que acelera y simplifica la construcción de aplicaciones
digitales de negocios a través de su plataforma Low-Code.
Con
el objetivo de impulsar la transformación digital, la compañía integra
nuevas tecnologías en sistemas heredados para mejorar los tiempos de
implementación y costos
de desarrollo de aplicaciones innovadoras sin necesidad de escribir ni
una sola línea de código.
La
plataforma de VeriTran es utilizada por más de 50 clientes alrededor
del mundo, alcanzando a más de 15 millones de usuarios que ejecutan de
forma segura más de 10 mil millones de transacciones
anualmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario