Alicia
Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la comisión regional de la ONU,
presentó los avances del Plan Integral de Autosuficiencia Sanitaria,
durante la XXI Reunión de Cancilleres de
la CELAC.
(24 de julio, 2021)
América
Latina y el Caribe puede y debe convertirse en un actor del desarrollo y
la producción de nuevas vacunas, en el marco de una estrategia
sanitaria
regional concertada, afirmó hoy Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de
la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), ante 32
ministras y ministros de Relaciones Exteriores y altas autoridades de la
región, congregadas en la XXI Reunión de
Cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños
(CELAC), que se celebró en México.
La
alta funcionaria de las Naciones Unidas presentó los avances del Plan
Integral de Autosuficiencia Sanitaria, una ruta programática que
desarrolla la CEPAL a petición
de la CELAC, para fortalecer la producción y distribución de
medicamentos, en especial vacunas, en los países de la región y reducir
la dependencia externa.
La
reunión fue inaugurada por el Canciller de México, Marcelo Ebrard, en
su calidad de Presidente Pro Témpore de la CELAC, quien destacó el
fortalecimiento de la cooperación
entre los países miembros de la Comunidad durante la pandemia.
“Si
antes de la pandemia se proponía que esta Comunidad fuese el
instrumento principal de integración de América Latina y el Caribe,
estamos en camino, sin duda, de
lograrlo”, afirmó el Ministro Ebrard.
Durante
su presentación, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL abordó la
situación de los sistemas de salud y la industria farmacéutica en la
región durante la pandemia,
así como las acciones prioritarias a implementar para su
fortalecimiento y los componentes del Plan Integral de Autosuficiencia
Sanitaria.
Recordó
que América Latina y el Caribe es la región más afectada por la
pandemia, con solo 8,4% de la población mundial, pero 32,5% de las
muertes por COVID-19 a nivel
global.
Alicia
Bárcena añadió que la región enfrenta hoy una paradoja porque, si bien
crecerá 5,2% en 2021, persiste el problema de la deuda y el menor
espacio fiscal, la
pobreza afecta a 209 millones de personas y la pobreza extrema a 82
millones, y la informalidad y el desempleo no se recuperan.
“Estamos en la trampa de los países de ingreso medio”, subrayó.
La
alta funcionaria alertó sobre el desigual acceso a las vacunas, y
puntualizó las asimetrías existentes dentro de la región y las que
persisten con el resto del
mundo. Precisó que en América Latina y el Caribe solo el 16,8% de la
población cuenta con el esquema completo de vacunación, mientras que en
Estados Unidos y Canadá la cifra alcanza al 49,3% de la población, con
un excedente de vacunas. Europa tiene al 44,6%
de su población vacunada.
“Nos
preocupa que la adquisición de algunos países supera sus necesidades de
vacunación. La Unión Europea, Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y
Japón concentran el
43,9% de los compromisos de compra, con solo el 12,9% de la población
mundial”, enfatizó.
La
máxima representante de la CEPAL subrayó que la industria manufacturera
de la salud en la región presenta bajo nivel de desarrollo tecnológico y
una alta dependencia
de la producción de empresas multinacionales e importaciones. Durante
2019, las importaciones doblaron el monto de las exportaciones y el
déficit superó los 20 mil millones de dólares.
“¿Por
qué nos pilló tan mal esta pandemia? Porque todo lo importamos, ese es
parte del problema. Nuestra industria nacional y regional produce
genéricos, pero no produce
medicamentos innovadores. Tenemos muy baja inversión en investigación y
desarrollo que tenemos que impulsar”, afirmó Alicia Bárcena.
En
su intervención ante las altas autoridades de la región, la Secretaria
Ejecutiva de la CEPAL detalló las ocho áreas prioritarias y cinco líneas
de acción del Plan
Integral de Autosuficiencia Sanitaria.
Las
áreas prioritarias incluyen la compra conjunta de los sistemas públicos
de salud, consorcios de financiamiento a investigación y producción,
plataformas de ensayos
clínicos, propiedad intelectual, inventario de capacidades regionales,
estándares regulatorios, desarrollo de proveedores y acceso universal a
la vacunación y la salud primaria.
Las
cinco líneas de acción en las que se ha avanzado y se propone avanzar a
nivel regional o subregional, en tanto, consisten en un mecanismo
regional
de compra de vacunas, la creación consorcios para acelerar el
desarrollo de vacunas, plataformas de ensayos clínicos, acceso a la
propiedad intelectual e inventario de capacidades regionales.
Alicia
Bárcena destacó la importancia de fortalecer los mecanismos regionales
de compras conjuntas de vacunas existentes, como el Fondo Rotatorio de
Vacunas
de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Fondo estratégico
de la OPS y la Red Panamericana para la Armonización de la
Reglamentación Farmacéutica.
Asimismo,
resaltó la relevancia de la articulación de sectores y actores mediante
los organismos de integración subregional como el Sistema de la
Integración
Centroamericana (SICA), la Comunidad de Países del Caribe (CARICOM), el
Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Alianza del Pacífico.
Finalmente,
la alta funcionaria de la ONU precisó que el plan propone cuatro
pilares para la acción conjunta convocando a una amplia gama de actores
nacionales,
subregionales y regionales: desarrollo de tecnología, desarrollo de
producto, manufactura y compras, entrega y acceso universal.