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Como
resultado de las jornadas de diálogo durante el Encuentro nacional de
maíces nativos, realizado del 27 al 29 de septiembre, productores de
Producción para
el Bienestar emitieron una declaratoria donde demandan la protección y
promoción de los maíces nacidos en México.
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Al
encuentro se sumaron productores de programas de Bienestar, Medio
Ambiente y Conahcyt y de la ciudad de México. Manifestaron que preservar
y mejorar los
maíces nativos abona a la defensa del decreto presidencial, el cual
busca la sustentabilidad y cosechas saludables.
Un
total de 107 productores de maíces nativos del programa Producción para
el Bienestar (PpB) procedentes de toda la República
emitieron una declaratoria de respaldo al decreto presidencial del 13
de febrero de 2023, sobre maíz transgénico, glifosato y transición
agroecológica.
Como
resultado de las jornadas de diálogo, realizadas del 27 al 29 de
septiembre en la Ciudad de México durante el Encuentro
nacional de productores y mejoradores de maíces nativos, el
pronunciamiento resalta la importancia de contar y continuar con
políticas públicas que defiendan a las razas nativas del maíz –64
identificadas en territorio mexicano— y que se mantenga la prohibición
al glifosato y a cualquier insumo químico que afecte la salud, a los
polinizadores y al medio ambiente en general.
La
declaratoria, de participantes en la Estrategia de Acompañamiento
Técnico (EAT) de PpB, se emitió luego de diálogos sostenidos
el 27 y 28 de septiembre en Casa Xitla, en la alcaldía Tlalpan, y fue
compartida con más de 200 productores de programas públicos de otras
instituciones, que se sumaron al Encuentro el día 29, Día Nacional del
Maíz, en Plaza Jacarandas, en el Complejo Cultural
Los Pinos.
Esos
productores, también centrados en maíces nativos, corresponden a los
programas Sembrando Vida, de la Secretaría de Bienestar;
Faros Agroecológicos y Pies Ágiles, del Consejo Nacional de
Humanidades, Ciencia y Tecnología (Conahcyt); de la Comisión Nacional de
Áreas Naturales Protegidas (Conanp), de la Secretaría del Medio
Ambiente, y a los del Gobierno de la Ciudad de México.
El
conjunto de productores estuvieron presentes en el Foro nacional en
defensa del decreto presidencial sobre maíz transgénico,
glifosato y transición agroecológica, efectuado el 29 de septiembre en
Los Pinos y encabezado por las titulares de las secretarías de Cultura y
Medio Ambiente, Alejandra Frausto y María Luisa Albores,y del Conahcyt,
Elena Álvarez-Buylla; el subsecretario de
Inclusión Productiva y Desarrollo Rural de la Secretaría de Bienestar,
Hugo Raúl Paulín, y el encargado de la Subsecretaría de Prevención y
Promoción de la Salud, Ruy López Ridaura.
En nombre del Encuentro Nacional, en el foro participó la productora de maíces nativos, María Clemencia Ortiz Flores, procedente
de Oaxaca y beneficiaria de la EAT de Producción para el Bienestar.
Valorar efectivamente a los maíces nativos, piden productores
Los
productores de maíz de PpB participantes del Encuentro son
representativos del millón 300 mil maiceros de pequeña escala
(con predios de hasta cinco hectáreas de temporal), que forman parte
del padrón de apoyos directos de Producción para el Bienestar y que
cultivan 44 de las 64 razas de maíz nativo que se tienen identificadas y
descritas para México.
En
su declaratoria establecieron que cultivar, mantener vivos, mejorar
genéticamente e impulsar la comercialización e innovaciones
tecnológicas en los maíces nativos abonan a la defensa del decreto y en
proteger la diversidad maicera, el medio ambiente y la salud de los
consumidores.
Estamos comprometidos en ello con el presidente Andrés Manuel López Obrador, puesto que sin campesinos, agua y maíz no hay
país, señalaron.
Los
diálogos del Encuentro se centraron en cinco rubros: a) Acciones de
mejoramiento multiplicación y conservación de maíz
nativo; b) Acciones de conservación y resguardo de semillas; c)
experiencias exitosas de manejo integrado del maíz; d) Comercialización
y/o valor agregado, y e) Desarrollo de tecnologías e innovaciones
apropiadas para la transición agroecológica.
El
documento también pide que los gobiernos y la sociedad reconozcan la
importancia de los maíces nativos y los valoren con
un precio diferenciado que estimule la siembra; destacar los beneficios
nutricionales de los maíces nativos e impulsar el valor agregado en los
subproductos del maíz.
Abunda
que se requiere de apertura de mercados y ampliación de canales de
comercialización de los maíces nativos; promover
el consumo local y los circuitos cortos de comercialización; contar con
una reserva estratégica de maíz y propiciar la formalización de
organizaciones y empresas sociales y registro de marcas para los granos
nativos.
Asimismo,
pide se implemente y opere la Ley Federal para el Fomento y Protección
del Maíz Nativo y que la Cámara de Diputados
vote favorablemente la Ley General de la Alimentación Adecuada y
Sostenible, recién aprobada por el Senado de la República y que regula
el derecho constitucional a la alimentación.
También,
difundir e invitar a los jóvenes y a más productores a sumarse a las
prácticas de mejoramiento de maíces nativos
y que crezca el número de técnicos y territorios donde se realiza el
acompañamiento técnico a favor de la transición agroecológica.
De igual forma, refieren, invitar a productores a incorporarse en las prácticas de mejoramiento, multiplicación y conservación
de semillas, y convertir a México en el principal país en la promoción de la transición agroecológica.
Establecen
además la importancia de promover eventos demostrativos y giras de
intercambio; establecer vitrinas tecnológicas;
ayudar a las y los productores a comprender y gestionar mejor sus
costos; buscar que la política pública reconozca y premie a los
agricultores que adopten buenas prácticas agroecológicas, para motivar a
otros a seguir su ejemplo y mostrar evidencia científica
de la efectividad de los bioinsumos, y usar todos los medios de
comunicación para difundir y promover la transición agroecológica y la
protección y conservación de los maíces nativos.
Piden
al gobierno otorgar incentivos financieros a los productores que
adopten prácticas agroecológicas e introducir la agroecología
en el plan de estudios de las escuelas, pues ello puede aumentar la
conciencia sobre prácticas sostenibles desde una edad temprana.
Postulan que se garantice que los promotores y comercializadores de agroquímicos se hagan responsables de las repercusiones
de estos productos en la salud y el medio ambiente.
Señalan también la necesidad de que los funcionarios públicos escuchen y trabajen junto con los productores para incentivar
las innovaciones que éstos implementan en maíces nativos.
Consideran indispensable que las universidades y centros de investigación realicen investigaciones sobre innovaciones adaptadas
para los pequeños y medianos productores, y ponerlas a su disposición.
Se
pronunciaron por organizar cooperativas para el logro de financiamiento
e impulsar las innovaciones; patentar las innovaciones
hechas por los productores, difundirlas y compartirlas con otros, y
propiciar las adaptaciones que se requieran.
Resaltan
también el tema del relevo generacional: “Debemos educar a los hijos
desde pequeños para que se involucren en la
apropiación de la transición agroecológica y sus innovaciones. Además,
revalorar la dieta de la milpa, conocerla, consolidarla y aplicarla para
conservar el maíz nativo”.