•Cuenta la médico general, originaria del municipio de Jaltenco, que
estuvo intubada nueve días, pero agradece al personal médico del
Hospital General de Las Américas, en Ecatepec, ya que su labor permitió
que ella siga con vida y ahora se recupera en su casa.
•Pide a la población a continuar llevando a cabo las medidas de
higiene y prevención, ya que es la mejor forma de cuidarse y evitar
padecer esta enfermedad.
Jaltenco, Estado de México, 2 de junio de 2020. Ella es
Tulia, médico general desde hace siete años, tiene un día de haber
obtenido su alta del Hospital General de Las Américas en Ecatepec, es
una guerrera que le ganó la batalla al COVID-19, esa enfermedad que ha
atacado a millones de personas en el mundo, y con su tono de voz bajo,
por las secuelas de haber estado en intubación nueve días, expresa que
ha vuelto a nacer y lo único que pide a la población es que se cuiden
mucho.
“Pues son momentos de mucho temor, porque uno no sabe qué va a pasar,
uno se debate entre la vida y la muerte, yo la verdad, sentía que no iba
a lograr salir adelante durante la intubación, es una experiencia muy
difícil, es algo que no le deseo vivir a nadie, ahorita estoy en casa
con mi familia, recuperándome”, afirmó.
“Es como prácticamente volver a nacer porque es una experiencia muy difícil y es volver a nacer prácticamente”, señaló.
Tulia de 34 años y su hermana Sandra Yulieth, trabajan como médicos
generales en una localidad indígena en San Luis Potosí, donde brindan su
servicio en unidades médicas móviles, lugar donde comenzaron a luchar
contra el COVID-19.
Sin embargo, el destino no quiso que ellas permanecieran en esta
localidad y tuvieron que combatir esta enfermedad desde su lugar de
origen, en Jaltenco, Estado de México, luego de recibir la noticia de
que su mamá estaba enferma.
Tulia estuvo al pendiente del cuidado de su mamá cuando ésta ingresó en
el Hospital Regional de Alta Especialidad de Zumpango, pero
lamentablemente su madre falleció el 1 de mayo y fue considerada un caso
sospechoso por COVID-19, posteriormente ella resultó ser un caso
positivo.
Ingresó el 18 de mayo al hospital, en Ecatepec, pasó nueve días
intubada, tiempo en el cual, ella luchó por su vida sin saber qué pasaba
en su entorno, sin tener idea de las horas y los minutos que
transcurrían, solamente dormía profundamente, estaba sedada.
“Comencé con dificultad respiratoria, motivo por el que se me tuvo que
intubar y es por eso que ahorita no se me escucha la voz, pero después
de nueve días de estar intubada, pasó ya la situación más crítica y
gracias a todo el personal del Hospital las Américas, ahora sigo
recuperándome en casa”, comentó.
Fue hasta el 1 de junio que Tulia fue dada de alta del hospital, pero su
recuperación continúa en proceso en casa, debe seguir aislada durante
dos o tres semanas, está con oxígeno que le deben colocar por ratos, se
vigilan sus signos vitales y tiene tratamiento antibiótico,
anticoagulante y analgésicos, y es su hermana Sandra Yulieth, quien
cuida de ella.
“Yo les sugiero a todos que de verdad crean en la enfermedad, que lleven
a cabo todas las medidas preventivas, porque todos estamos en riesgo,
afortunadamente yo logré superar esta enfermedad. Cuídense mucho”,
expresó.
Sandra Yulieth dice, por su parte, que para la familia fue un proceso
muy complicado, primero la muerte de su mamá y después la enfermedad de
su hermana, pero da las gracias por el apoyo del personal médico del
Estado de México, principalmente a quienes lograron que Tulia se
recuperara para que ella pueda cumplir con la misión laboral que dejó
pendiente, seguir cuidando de la salud de las comunidades indígenas de
San Luis Potosí, donde lleva cinco años ayudando a la población.