• Acusó el ilegal encarcelamiento, la
persecución política y judicial, así como el robo y ataques a inmuebles de
defensores de derechos humanos y de integrantes de la población
• Han talado nuestros bosques,
desgajados nuestros cerros, despojándolos del agua, situación que trastoca
gravemente la organización comunitaria
• Pidió no olvidar a los integrantes de
organizaciones de derechos humanos que por su labor han enfrentado agresiones,
ya sea de manera colectiva e individual, ya que el Estado ha implementado
diversas formas de agresión contra los defensores
En
los primeros cinco años de vida, el Centro de Derechos Humanos “Zeferino
Ladrillero” ha enfrentado amenazas, criminalización, judicialización,
agresiones físicas, encarcelamientos y persecución por autoridades de la
entidad mexiquense, en un intento de estigmatizar, hostigar e intimidar a los
pueblos y comunidades indígenas que se organizan para defender las garantías
individuales a fin de frenar el sistemático proceso de despojo de recursos
naturales (agua y bosques) ante un
desarrollo voraz que sólo beneficia a un reducido grupo político y empresarial.
Así
lo expresó el coordinador de dicha asociación civil, José Antonio Lara Duque,
al presentar su informe de labores en el que denunció que en el primer lustro
de defensa de los derechos humanos se han enfrentado un total de 60 agresiones
por parte de entes del gobierno mexiquense, en las que resaltó el ilegal
encarcelamiento, la persecución política y judicial, el robo y ataques a
inmuebles de defensores de los derechos humanos e integrantes de la población
que luchan en contra del despojo territorial, el daño al medio ambiente y la
administración del agua.
Ante
integrantes de diversas organizaciones que defienden las garantías
individuales, el ombudsman mexiquense dijo que la construcción de autopistas,
aeropuertos, conjunto habitacionales, han puesto en riesgo los derechos básicos
de la población mexiquense, ya que se registran desplazos de sus lugares de
origen, ante los poderosos grupos políticos y económicos —ligados al priísmo—
que han talado sus bosques, desgajados sus cerros, despojándolos del agua,
situación que trastoca gravemente la organización comunitaria. El CDHZL ha
defendido un total de 34 casos de despojos de tierra y agua, entre otros.
Estas
34 luchas se desarrollan en distintos puntos geográficos del estado de México,
siendo albergadas en 22 municipios, principalmente en la zona Oriente de la
entidad, donde el intereses del gobierno —y de un reducido grupo de empresas—
ha lucrado con la pobreza y la marginación de esta región del país. “Si bien
los derechos humanos son violentados por agentes del estado, esto puede suceder
por omisión, comisión o aquiescencia”, dijo.
Lara
Duque pidió en su informe no olvidar a los integrantes de organizaciones de los
derechos humanos que, por su labor, han enfrentado agresiones, ya sea de manera
colectiva e individual, ya que el Estado ha implementado diversas formas de
agresión contra los defensores.
El
camino por recorrer para quienes defienden las garantías individuales es aún
largo y se torna complicado, “es por eso desde el Centro de Derechos Humanos “Zeferino
Ladrillero” hacemos un llamado a los ciudadanos mexiquenses a no flaquear y
seguir resistiendo, seguir luchando por la vida digna a la que todos los seres
humanos tenemos derecho. Invitamos también a todos los presentes a seguir
solidarizándose y hermanándose con otras luchas”.
Advirtió
que el arribo a la gubernatura de Alfredo del Mazo —hijo y nieto de
exgobernadores y ahijado político de poderosos políticos priístas— hace pensar
que la articulación entre quienes defendemos los Derechos Humanos deberá
mantenerse consolidada y demostrar que es más fuerte que aquellos que ostentan
el poder y hacen uso legítimo de la fuerza.
Finalmente,
el coordinador del CDHZL reconoció la labor que cada uno de los defensores de
derechos humanos y de las comunidades y pueblos originarios que todos los días
luchas por lograr el derecho a una vida digna.
+++
No hay comentarios:
Publicar un comentario