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En México,
la desertificación o degradación del suelo, afecta al 65% del territorio y al
58% de la población, impactando la productividad agrícola y la sostenibilidad
ambiental, de acuerdo con el Indicador integrado de la degradación del recurso
edáfico.
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El
proyecto "NduteÑu", liderado por Celestino Sandoval de la Universidad
del Mar, restaura suelos áridos en Oaxaca plantando Opizia stolonifera y otras especies, con apoyo de estudiantes de
ingeniería forestal.
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"NduteÑu"
es parte de la iniciativa "Maestros que Dejan Huella" de iLab, que
promueve la innovación en las aulas. Desde 2023, ha fortalecido proyectos de
docentes en todo el país, beneficiando a más de 16,000 personas en México.
Ciudad de México, agosto de
2024.- La pérdida de suelo fértil es una problemática crítica que
afecta la productividad agrícola y la sostenibilidad ambiental en México,
debido a que los suelos degradados pierden su capacidad de retener agua,
disminuyendo la recarga de acuíferos. Se estima que la degradación de las
tierras reduce el Producto Interno Bruto (PIB) de los países en desarrollo
hasta en un 8 por ciento, consideró Blanca
Lucia Prado Pano, investigadora del Instituto de
Geofísica de la UNAM.
En el
país, de acuerdo con datos del Indicador
integrado de la degradación del recurso edáfico (suelo) se
estima que hasta el 65 por ciento del territorio y más del 58 por ciento de la
población es vulnerable ante los procesos de desertificación del suelo, entre
estos espacios se encuentra la zona costera sur de Oaxaca.
Para
combatir este problema, en esta zona trabaja Celestino Sandoval, un maestro
universitario que nació en la localidad de Ignacio Zaragoza, municipio
oaxaqueño de Magdalena Peñasco. La escasez de agua y la falta de cobertura de
los suelos son desafíos constantes que han afectado la vida de los habitantes
de su comunidad, por lo que creo se sumo a la iniciativa “Maestro que Dejan
Huella, impulsado por la consultora en
innovación iLab, con
el proyecto “NduteÑu”,
dedicado a la restauración de suelos con la plantación de Opizia stolonifera, conocida coloquialmente como “pasto de conejo”,
y algunas otras especies arbóreas,
“Maestros
que Dejan Huella” es una de las 11 iniciativas educativas con impacto social
que promueve la consultora iLab, las
cuales han tenido incidencia positiva en más de 450 mil personas en los últimos
10 años. El programa se activa con un modelo tripartita, el profesor es el
catalizador y guía del proyecto, los estudiantes reciben conocimiento y activan
la iniciativa en la sociedad y los miembros de la comunidad participan en él
con el diseño de la solución, son beneficiarios de ella y evaluadores del
impacto.
Mariana
Levet, líder de las iniciativas de impacto social de iLab, explicó que la idea
de fortalecer propuestas como la de Celestino, surge del potencial de cambio
que pueden alcanzar con el impulso adecuado.
“Lo que significa esta iniciativa
construir puentes, conexiones, y cerrar la brecha de contactos, de habilidades,
de alianzas para que estos proyectos tengan el potencial de crecer, de escalar
y de seguir trabajando para generar mejores resultados, sobre todo para la
comunidad para la que se están desarrollando, con miras a convertirse en
empresas sociales”, contó con entusiasmo Levet.
Este
programa, nacido en 2023, ha visto florecer los proyectos comunitarios que han
incidido positivamente en más de 16 mil personas a lo largo del país y que
buscan consolidarse como referentes dentro de sus comunidades para replicar sus
iniciativas en otras áreas de oportunidad.
Antes
de ser seleccionado por la iLab, Celestino trabajó por su cuenta por algunos
años, comenzando con un proyecto de bombas de semillas, ha sumado a estudiantes
de ingeniería forestal de la Universidad del Mar, quienes realizan labores de
campo y han mostrado interés en la restauración de los suelos y el impacto
positivo que puede tener en la vida de las personas. Gracias a “NduteÑu”
otras 545 personas de la localidad de Celestino han sido capacitadas para
lograr la recuperación de suelos degradados.
A
pesar de las dificultades, la idea de Celestino tiene una gran posibilidad de
escalabilidad hacia otras comunidades que enfrentan problemáticas similares,
brindando soluciones a largo plazo para la escasez de agua.
“Tiene un gran potencial este proyecto. Visualizo un
futuro prometedor en ese sentido, ya que podemos capitalizarlo, a partir de
ello, podría incluso surgir una empresa dedicada a cerrar todo el proceso de
manera integral”,
sostiene el docente.
La
consultora en innovación iLab desarrolló el programa inspirándose en los
docentes, pues en sus más de 10 años de experiencia fortaleciendo proyectos en
México, han aprendido que los profesores son figuras clave en la construcción
de comunidad y quienes más apoyan a los jóvenes a convertirse en agentes de
cambio.
“Lo que buscamos es impulsar que la
innovación sea un componente esencial de las aulas en nuestro país para que pueda generar un cambio, un impacto
social desde la formación de hombres y mujeres jóvenes que están incidiendo
directamente en la comunidad porque son los que van a trabajar por el futuro
del país”, explicó Mariana Levet.
La
edición 2024 de esta iniciativa ya se encuentra abierta, a continuación puedes
ingresar a la Convocatoria “Maestros que
Deja Huella”, la cual estará disponible hasta el 16 de
agosto. Los seleccionados recibirán asesorías y mentorías para iniciar el 2025
impactando a miles de personas en su comunidad.
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