La
atención centrada actualmente en nuestros sistemas sanitarios nos
recuerda una vez más que son un servicio absolutamente vital para
nuestras comunidades, que siempre se esfuerzan por ofrecer la mejor
atención posible en entornos complejos y cambiantes. Sin embargo, en
medio de una pandemia global, también se enfrentan a retos cada vez
mayores como la saturación de las salas de urgencias, la escasez de
equipos de protección personal (EPP) y el número limitado de camas en
las unidades de cuidado intensivo (UCI).
Aunque el año 2021 llega con un renovado sentido de la esperanza, los
hospitales seguirán experimentando restricciones presupuestarias y
altos porcentajes de ocupación de camas. Tan solo el pasado 9 de febrero, el Gobierno de la Ciudad de México reportó un 72.7 % de ocupación en las camas UCI.
Aún así, los hospitales no quieren implementar tecnologías no probadas o
desplegar sistemas completamente nuevos para ayudar a resolver los
continuos desafíos a los que se enfrentan. Por lo anterior, en lugar de
esperar a que aparezcan tecnologías totalmente nuevas en el mercado,
muchos centros están estudiando las soluciones existentes y aplicándolas
de forma novedosa.
Un sector que puede ofrecer a los hospitales una gran variedad de
soluciones innovadoras es el de la seguridad física. Ante esta pandemia
global que requiere mantener la distancia física y vigilar de cerca los
posibles brotes, un sistema de seguridad que incluya la gestión de
video, el control de acceso y la gestión de las comunicaciones puede ir
más allá de la seguridad física tradicional para convertirse en una
herramienta estratégica en la lucha contra la pandemia.
Interacciones virtuales con los pacientes
En enero de 2021, según la Secretaría de Salud,
México registró el mayor número de casos positivos con 438,166 y fue el
mes más letal con 32,729 muertes. Algo similar sucedió en marzo y abril
de 2020, cuando la ciudad de Nueva York se enfrentaba al mayor número
de casos de COVID de los Estados Unidos. Los hospitales estaban luchando
y la situación parecía especialmente sombría. El personal se sentía
vulnerable al virus, los trabajadores de primera línea estaban
renunciando y el hospital estaba gastando el EPP a un ritmo alarmante.
Esto se debía a que, para evitar la propagación del virus de paciente a
paciente, cada vez que el personal médico entraba en la habitación de
alguien, tenía que ponerse un nuevo EPP, lo que significaba que hacer
simples revisiones en una planta podía requerir varios cambios.
La gerencia del hospital sabía que debía reducir las interacciones en
persona, entre los pacientes y el personal. Esto reduciría el uso de
EPP y limitaría la posible transmisión del virus. La respuesta fue
aprovechar la plataforma de seguridad del hospital, Genetec™ Security Center con su módulo SIP, Sipelia™,
para gestionar intercomunicadores con cámaras de seguridad en las
habitaciones de los pacientes, o unidades de intercomunicación montadas
en carros de suero. Esto permitió al personal médico hablar directamente
con los pacientes a través de la unidad de intercomunicación y utilizar
el video en directo para realizar evaluaciones médicas visuales básicas
sin entrar en la habitación.
De esta manera, las necesidades de los pacientes podían ser
determinadas por la primera enfermera disponible antes de enviar a
alguien con equipo de protección para disminuir el riesgo de transmisión
y optimizar el uso del EPP.
Desde la implementación de la solución, cerca del 70% de las
interacciones entre enfermeras y pacientes con COVID-19 son ahora
virtuales. Los pacientes pueden iniciar llamadas cuando necesitan
asistencia, y las enfermeras pueden controlar a unos 16 pacientes desde
su puesto. El hospital está tan satisfecho con los resultados que,
cuando tienen tiempo, la gerencia está hablando con otros hospitales
para ayudarles a implementar la misma solución.
Aunque esta solución se desarrolló para responder a una necesidad
específica en torno al virus COVID-19, altamente contagioso, también
puede utilizarse en el futuro. La capacidad de comunicarse a través de
video bidireccional permitirá al personal médico determinar con
precisión las necesidades de un paciente y enviar rápidamente a alguien a
una habitación si es necesario.
Reducir la posibilidad de transmisión
Cuando se trata de mitigar los riesgos asociados a la propagación del
COVID-19, poder seguir los movimientos de las personas expuestas al
virus puede desempeñar un papel importante. Una plataforma de seguridad
unificada, combinada con un módulo flexible de informes, puede ayudar.
Al principio de la pandemia, Genetec respondió a la petición de un
cliente desarrollando un "Informe de proximidad de
contagio/contaminante" que puede generarse si un empleado o visitante da
positivo. Con un solo clic, un operador puede ver en cuáles puertas ha
accedido esa persona. El informe de actividad proporciona una lista de
todas las personas que pasaron por las mismas puertas dentro de una
ventana de tiempo definida y vincula las secuencias de video asociadas.
Este tipo de análisis forense puede ser extremadamente beneficioso
para las organizaciones que buscan utilizar la tecnología que ya tienen
para proteger mejor a los empleados, los visitantes y la comunidad en
general.
Gestión de los medicamentos y protección contra la violencia laboral
Además de mitigar la propagación del virus, los sistemas de
localización en tiempo real (RTLS por sus siglas en inglés) también
puede ayudar a los hospitales a hacer un seguimiento de los medicamentos
y los equipos. Al colocar sensores RTLS en los equipos del hospital y
en los carros de la farmacia, y mediante dispositivos Bluetooth en toda
la instalación, el sistema de seguridad física puede triangular la
ubicación de los sensores RTLS y mostrar exactamente dónde están los
equipos y los carros en un mapa gráfico.
Por otro lado, es un hecho triste que las preocupaciones de seguridad
relacionadas con la violencia son un problema persistente en las
instalaciones médicas. Una de las formas en que la gerencia puede ayudar
a la seguridad del personal y los pacientes en hospitales, es asegurar
que el personal tenga un acceso rápido a la asistencia cuando y donde la
necesite.
Al añadir el RTLS y los botones de coacción a las tarjetas de
identificación del personal, los hospitales pueden proteger mejor a su
personal de la violencia reduciendo los tiempos de respuesta. Si un
miembro del personal se siente inseguro o en peligro, sólo tiene que
pulsar el botón de coacción de su placa. Esto envía una notificación
inmediata al personal de seguridad que puede responder rápida y
adecuadamente a la alarma, conociendo la ubicación exacta donde se
genera la alerta gracias al RTLS.
Mantener el suministro de EPP
Uno de los sorprendentes retos a los que se enfrentan los hospitales
en relación con la pandemia de COVID-19 es la gestión de los EPP. Para
esto, los hospitales pueden instalar un quiosco de control de acceso,
que muestre los artículos de EPP e insumos médicos disponibles en el
armario. Así, para acceder al EPP habría que pasar primero la credencial
del personal autorizado y luego seleccionar los artículos. El sistema
también podría configurarse para incluir el video de los alrededores y
correlacionarlos con cada solicitud. Toda la transacción quedaría
vinculada a la credencial autorizada, lo que significa que el personal
de seguridad podría revisar el evento, incluyendo las imágenes de video
asociadas.
Para proteger aún más el inventario, los hospitales también pueden
configurar el sistema para que el personal pueda informar de cualquier
discrepancia. A medida que el personal va seleccionando el equipo que
necesita del armario, el quiosco le muestra exactamente cuántos de esos
artículos hay en el inventario. Si el contenido del armario no coincide
con las cantidades que aparecen en la ventana del quiosco, el personal
puede hacer clic en ELEMENTO FALTANTE. El sistema enviará entonces una
notificación a seguridad, que iniciará una investigación y mirará el
video asociado a las
transacciones anteriores.
Puntos de control
Para minimizar los riesgos de brote en las zonas de entrada de los
hospitales, suelen establecerse puntos de control en los que se hacen
preguntas a los empleados y visitantes para ayudar a determinar el
riesgo de contagio que presentan. Pero el seguimiento manual ralentiza
el proceso, interrumpiendo la actividad, y al igual que el recuento
manual es muy propenso a errores.
Por lo tanto, los centros de salud están buscando soluciones que
ayuden a automatizar el proceso de chequeo de los empleados y visitantes
que ingresan a las instalaciones. Utilizando un sistema de apoyo a la
toma de decisiones como Genetec™ Mission Control,
los hospitales y centros sanitarios pueden digitalizar fácilmente el
cuestionario de control. El sistema guía al personal a través de cada
paso, identificando a las personas que requieren un examen adicional.
También centraliza los datos recogidos y automatiza la notificación a
los supervisores, lo que conduce a un proceso más rápido que minimiza la
interrupción operativa.
Conclusión:
Durante la pandemia, muchos centros de salud están utilizando sus
sistemas de seguridad física y desarrollando soluciones innovadoras para
proteger mejor al personal y a los pacientes. Sin embargo, el impacto
de estas soluciones se dejará sentir mucho después de que se haya
controlado la crisis actual, ya que también ayudarán al sector de la
salud a resolver los persistentes problemas relacionados con el
equipamiento de los hospitales, la atención a los pacientes y la
violencia en el lugar de trabajo. |