Por Danny Allan,
CTO y Vicepresidente Senior de Estrategia de Producto de Veeam
Los desarrolladores tendrán más voz en la dirección de la tecnología y la estrategia de datos de las empresas
Veremos un agresivo “giro hacia la
izquierda” en todas las industrias, donde los CIO dependerán más de sus
equipos de Desarrollo para guiar la dirección tecnológica de la
organización. Históricamente, los equipos de Desarrollo han adoptado
un enfoque de arriba hacia abajo para mover sus datos a la nube pero,
como ha sucedido con muchas cosas en el mundo, esto cambió con la
pandemia ante el reforzamiento de los entornos basados en nube.
En 2021, los equipos de DevOps
seguirán teniendo más voz en el proceso de estrategia de datos y, como
resultado, será notorio un mayor aumento en la movilidad de las cargas
de trabajo, lo que se correlaciona con un aumento en las tecnologías
de gestión de datos en la nube.
Mayor enfoque en proteger y administrar los datos de la plataforma de colaboración laboral en la nube
Las fuerzas de trabajo distribuidas ya
estaban en una trayectoria ascendente, pero se han acelerado por
completo debido a la pandemia de COVID-19. Con múltiples empresas
ampliando las oportunidades de trabajo desde casa hasta mediados del
año entrante, la dependencia de las plataformas de colaboración basadas
en la nube, como Microsoft Teams y Slack, no hará sino incrementarse.
Esto significa que incluso más equipos estarán buscando aprovechar el
poder de la nube para almacenar una afluencia
de datos en plataformas de colaboración.
En 2021, esta situación será la base
para un mayor enfoque, conciencia y necesidad de protección y gestión de
datos para el software de colaboración.
Con el declive del hardware, los modelos definidos por software se volverán más prominentes
Los aparatos disminuirán en su
atractivo a medida que cambiemos hacia modelos definidos por software.
Hace 10 años, estos aparatos eran esos juguetes nuevos que todos querían
tener en sus manos, pero no han tenido el poder de permanencia
que predijimos que tendrían. De hecho, hemos visto un alejamiento de
estos equipos y un cambio hacia el respaldo como servicio.
El trabajo remoto durante la pandemia
ha tenido un impacto real en la forma como manejamos el hardware en
2020, el cual continuará en 2021 a medida que los modelos definidos por
software ocupen un lugar central.
El aprendizaje automático (o Machine Learning) se democratizará en la nube en torno a los datos
Ya estamos viendo que las
organizaciones reconocen las oportunidades ilimitadas que están
disponibles para ellas a través de los datos con los que ya cuentan. La
reutilización de datos será una gran tendencia hacia la que las empresas
estarán
atendiendo en 2021, y muchas aprovecharán el poder del aprendizaje
automático para ayudarse a hacerlo.
Esto aún se encuentra en etapas
emergentes; sin embargo, su adopción aumentará a medida que las
compañías reconozcan cómo puede ayudarlas el analizar y reutilizar los
datos que ya tienen. Al tomar ventaja del Machine Learning en la nube,
las organizaciones se volverán más inteligentes.
Las multas de regulación de cumplimiento no verán un repunte; se mantendrán con tendencia a la baja
La privacidad de datos y las
regulaciones de privacidad continuarán ganando terreno en 2021. En
particular, mi predicción es que veremos las primeras regulaciones
federales propuestas sobre privacidad en Año Nuevo. Con todo, las mutas
por
cumplimiento seguirán con la tendencia a la baja que vimos durante
2020.
En 2019, detectamos un aumento masivo
en multas por cumplimiento, lo que solidificó la seriedad con la que se
debían tomar el GDPR, la CCPA y otras reglamentaciones. Ahora que se ha
recibido esta atención y la conciencia está ahí, el cambio
será más hacia una mayor coherencia de las regulaciones de privacidad a
nivel federal.
El gasto de TI se recuperará después de 2020: seguridad y hardware estarán al inicio de la lista
A pesar de la turbulencia económica
provocada por la pandemia en este año, veremos un aumento de 5 a 10 por
ciento en el gasto general de TI durante el Año Nuevo. Es probable que
las asignaciones se centren más bien en seguridad, modernizaciones
generales del sistema (respaldo, aplicaciones, migraciones de nube,
etc.) y actualización del hardware. Adicionalmente, las empresas echarán
un vistazo a lo que se quedó “en espera” en 2020 para abordar el gasto
de TI que se hace de forma recurrente cada año.
Por ejemplo, el hardware debería actualizarse cada 3 años, y si la
pandemia detuvo la atención de una compañía hacia esto, es justo decir
que el hardware se abrirá camino en su caso hasta el principio de su
lista en 2021.
Este año, también estaremos en una
posición única para ver un impulso adicional en el gasto y asignaciones
de TI pasadas las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Éstas
tienden a mostrar desaceleraciones históricas en la distribución
del dinero, debido a la incertidumbre de los resultados y del eventual
candidato que ocupará la Casa Blanca. Después de noviembre, veremos que
el dinero se canalizará de manera que refleje el resultado, de forma
similar a como se estabilizarán otros gastos
de TI a medida que observemos una verdadera recesión en la pandemia o
el progreso de una vacuna y un regreso a la “normalidad”.