● Pitz cierra 2025 con más de 100 talleres activos y comparte los
aprendizajes más relevantes que dejó el primer año de adopción real de
inteligencia artificial en el sector mecánico independiente de México.
Ciudad
de México, diciembre de 2025.— Hasta hace poco,
hablar de inteligencia artificial en México significaba pensar en grandes
corporativos, universidades o laboratorios tecnológicos. Pero 2025 rompió ese
paradigma: este año, la IA llegó a un lugar donde nadie la había imaginado hace
apenas unos años —los talleres mecánicos independientes.
La
llegada no fue silenciosa. Transformó rutinas, acortó tiempos de respuesta y
dio visibilidad a procesos que durante años transcurrieron de manera informal.
Entre quienes impulsaron este cambio destaca Pitz, la plataforma de IA y
gestión por voz creada en México, que cerró 2025 superando los 100 talleres
activos y recogiendo aprendizajes que revelan cómo está cambiando este oficio
esencial para la movilidad del país.
Lo
que encontraron no fue resistencia, como algunos anticipaban, sino una
adaptación sorprendentemente orgánica. Los mecánicos descubrieron que podían
usar la IA sin cambiar su forma de trabajar: describen fallas con su propia
voz, explican ruidos como lo han hecho siempre y reciben de inmediato una guía
técnica que complementa su experiencia. Esa naturalidad —más que cualquier
avance técnico— fue lo que marcó el verdadero punto de quiebre del año.
El
cambio también fue visible en la relación con los clientes. Varios talleres
comenzaron a ofrecer actualizaciones más claras, cotizaciones más rápidas y una
comunicación más formal, lo que redujo retrasos y preocupaciones que antes eran
inevitables. Otros descubrieron que la tecnología les ayudó a identificar un
problema silencioso pero costoso: los autos retenidos que ocupaban espacio y
tiempo mientras faltaban diagnósticos, piezas o autorizaciones.
Las
historias que dejó el año son diversas pero comparten un punto en común: la IA
no reemplazó el oficio; lo ordenó. Un taller familiar que durante años operó
con libretas logró digitalizar todo su flujo de trabajo sin dejar de usar sus
métodos tradicionales; un negocio en Guadalajara comenzó a documentar cada
reparación con fotografías y notas digitales; y mecánicos que habían evitado la
tecnología durante años hoy envían reportes y cotizaciones desde su celular.
“Lo
que vimos este año es que la IA sí funciona cuando parte de la realidad del
mecánico. No se trata de cambiar su manera de trabajar, sino de darle una
herramienta que le ahorre tiempo y le dé más certeza. Si un diagnóstico puede
hacerse en minutos, si una cotización se envía sin retrasos y si el taller se
organiza desde el celular, estamos un paso más cerca de algo que me mueve
muchísimo: que cualquier persona pueda reparar su auto en menos de 24 horas”, afirma Natalia Salcedo, CEO y fundadora de Pitz.
Pitz
cierra 2025 consolidando su presencia en México y preparándose para un 2026
enfocado en mejorar la velocidad, precisión y entendimiento contextual de Chalán,
además de ampliar sus integraciones con proveedores para facilitar el acceso a
refacciones compatibles dentro de la plataforma.
Este
año dejó claro que la inteligencia artificial ya no es exclusiva de oficinas o
laboratorios: también vive en los talleres de barrio, entre herramientas,
elevadores y manos llenas de grasa. Y el cambio apenas comienza.
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