La empresa petroquímica tuvo un 2022 fuera de serie, precios del petróleo altos,
márgenes elevados y un aprovechamiento del encarecimiento de las cadenas de
suministro que potenciaron sus resultados y con ello su acción. Lo esperado
sucedió, las cadenas de suministro se normalizaron al igual que el precio del
petróleo, lo que llevo a la natural contracción de su ingreso y EBITDA, así mismo
el abaratamiento del flete marino desde China generó una caída en su volumen;
dado que sus clientes norteamericanos rotaron de regreso con sus proveedores
asiáticos.
Este tema ha sido comunicado por la administración como algo que estaba
descontado, y las expectativas sobre los resultados de este año han sido
manejadas de acuerdo a este escenario. No obstante, en lo que va del año se han
tomado diversas decisiones estratégicas y financieras que nos llevan a pensar que
el impacto puede ser mayor del que en un inicio se esperaba.
Cierre de la planta Cooper River. Al inicio del año se cerró la planta de forma
indefinida en búsqueda de optimizar su capacidad instalada. Si bien, la planta se
era antigua y su capacidad fue relocalizada en su totalidad, este hecho nos
confirmó la caída en la demanda en el mercado norteamericano. El impacto fue de
14 mdd en costos no recurrentes y 47 millones en deterioro de activos (solo el 2%
de los activos de Alpek).
Reducción de la guía del 2023. En el segundo trimestre la empresa compartió su
decisión de disminuir su guía anual. El efecto fue: a) volumen de 4.90 a 4.65
millones de toneladas (-5%), b) ventas de 9,170 a 7,700, c) EBITDA comparable
de 920 a 770 mdd (-16%) y d) CAPEX de 335 a 300 mdd. Esto ajustó de nuevo
las expectativas a la baja de los resultados de la empresa.
Cierre de la planta de producción de filamentos. En agosto, la compañía
anuncio el cierre de la planta de producción de fibras textiles e industriales en
Monterrey. El impacto inmediato para Alpek son los costos no recurrentes por el
recorte de personal de la planta, y en algún momento podrá vender los activos de
la misma. Con una capacidad instalada de 100 mil toneladas de polímero y
filamento su aporte a los resultados de la empresa se estimó como mínimo.
Pausa en la construcción de la planta Corpus Christi Polymers. Dicho
proyecto es parte de la estrategia de la empresa para aumentar su capacidad, la
cual se pronosticaba estaría en operación a partir del 2025. La decisión de pausar
nace de altos costos de construcción y laborales derivados del ambiente
inflacionario. Si bien, este es un costo y riesgo compartido debido a la estructura
de joint venture, esto se alinea con el decremento en CAPEX de la empresa y
demuestra una mejor posición financiera, pero atrasa los beneficios esperados.
De manera agregada la empresa ha tenido diversos eventos relevantes durante el
año que acentúan la situación y el cambió de dirección con respecto al año pasado.
Para su acontecimiento más reciente que es dependiente de la inflación,
pudiéramos esperar un tiempo antes de ver que la inflación ceda lo suficiente para
permitir que los costos se ajusten a lo planeado. Por otra, parte el repunte del
petróleo en recientes fechas pudiera apoyar a sostener los resultados de Alpek en
el corto plazo, y posiblemente podríamos ver una recuperación en sus números
en el 4T.
No hay comentarios:
Publicar un comentario