A pesar de que la inflación subyacente persiste sobre niveles elevados, los actuales niveles de tasas, la próxima desaceleración en el crecimiento, el relajamiento de las distorsiones de oferta y un relativo control de las expectativas inflacionarias permitieron a los bancos centrales de México y Estados Unidos reducir el ritmo de restricción monetaria en diciembre.
Por otra parte, tanto Banco de México como la Reserva Federal podrían realizar al menos un aumento más en sus respectivas tasas de referencia antes de concluir el ciclo de restricción monetaria en 2023
La semana pasada …
En línea con lo previsto por el mercado, tanto Banco de México (Banxico) como la Reserva Federal (FED) incrementaron el objetivo de la Tasa de Interés Interbancaria a un día y el intervalo objetivo de la Tasa de Interés de Fondos Federales en 50 puntos base (pb). Los aumentos pasados en ambos casos habían sido de 75 pb.
Después de un ciclo de alzas que Banxico inició en junio de 2021 y la FED en marzo de 2022, ambos bancos centrales finalmente están próximos a concluir la etapa de restricción monetaria.
Sin duda, los elevados niveles de tasas que se registran actualmente (que en el caso de México se encuentra aún en un nivel más restrictivo en términos reales), la expectativa de un crecimiento más bajo (o incluso una posible recesión en Estados Unidos), menores distorsiones de oferta (sobre todo aquéllas generadas por la pandemia o la guerra Rusia-Ucrania en los mercados de semiconductores y materias primas), así como un relativo control de las expectativas de inflación (que han dejado de corregirse significativamente al alza), serían los principales argumentos a favor de subir menos las tasas en el primer trimestre de 2023.
Si bien los ciclos monetarios restrictivos en México y Estados Unidos están próximos a su fin, es probable que las tasas de interés en ambos países se mantengan elevadas por varios meses antes de iniciar una trayectoria de baja.
La duración de las tasas altas dependerá principalmente de la inflación. Sobre todo, de que ésta confirme una trayectoria de descenso hacia los objetivos de 2% y 3% +/- 1.0% de la FED y Banxico, respectivamente.
Después de ubicarse en 8.0% y 7.0% al cierre de 2022, nuestras estimaciones para las inflaciones de México y Estados Unidos al cierre de 2023 inician el año en 5.3% y 4.5%.
En el contexto global:
Además de la decisión de política monetaria de la FED, la atención del mercado se centró en la inflación. De acuerdo con el Departamento del Trabajo de Estados Unidos (dependencia encargada de medir la inflación en aquel país), el Índice de Precios al Consumidor (CPI, por sus siglas en inglés) aumentó 0.1% m/m en noviembre contra 0.3% esperado por el consenso. Los menores precios de gasolina y gas (-2.0% y -3.5% mensual, respectivamente) restaron presión sobre el índice general.
La inflación subyacente (la que excluye los precios de alimentos y energía) se ubicó en 0.2% mensual (0.3% esperado). Al interior de esta categoría, destacaron las caídas en los precios de vehículos usados por quinto mes consecutivo, en servicios de salud y finalmente en equipo de transporte. Los precios que aún no ceden son los relacionados con vivienda, principalmente rentas.
Las variaciones anuales para el CPI general y subyacente pasaron de 7.7% a 7.1% y de 6.3% a 6.0%, respectivamente.
En cuanto a información del sector real, los índices de las encuestas manufactureras de Nueva York y Philadelphia se ubicaron por debajo de lo esperado por el mercado (-11.2 y -13.0 puntos en diciembre, respectivamente). El comportamiento de estos índices reforzó nuestra expectativa de más caídas en la producción manufacturera de Estados Unidos, misma que retrocedió 0.6% el mes pasado (-0.1% esperado).
Las cifras también fueron negativas en lo que respecta a consumo. De acuerdo con la Oficina de Estadísticas (Census Bureau), las ventas al menudeo de Estados Unidos cayeron 0.6% a tasa mensual en noviembre (-0.1% esperado). Excluyendo autos y gasolina, las ventas retrocedieron 0.2% m/m. Es probable que el consumo continúe debilitándose debido a mayores tasas de interés en el mercado de crédito.
Lo que se mantiene firme es el empleo. De acuerdo con el Departamento del Trabajo, las solicitudes semanales del seguro de desempleo se ubicaron en 211 mil unidades, por debajo de las 230 mil estimadas por el consenso.
México:
Además de la decisión de política monetaria de Banxico, la semana pasada destacó el dato de producción industrial para nuestro país.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Indicador Mensual de Actividad Industrial (IMAI) creció 0.4% a tasa mensual en octubre, cifra mayor a la esperada (0.1% m/m).
Al interior de las cifras, destacó el avance de 1.0% m/m en la parte de construcción, misma que recibió el impulso de las categorías de edificación (1.3% m/m) y trabajos especializados para la construcción (1.0% m/m). La construcción de obras de ingeniería civil creció apenas 0.1% en el mes.
En lo que respecta a manufacturas (0.1% a tasa mensual), la fabricación de insumos textiles retrocedió 2.2% m/m; la de equipo de computación y medición (-)1.9% m/m; equipo de transporte (-)0.3% m/m y muebles para el hogar (-)1.0% m/m. En contraparte, la fabricación de productos derivados de petróleo y carbón aumentó 10.5% m/m después de cinco meses consecutivos de caídas.
En general, esperamos que la producción manufacturera de México se vea afectada por un freno en el crecimiento de Estados Unidos en 2023. Principalmente en lo que respecta a bienes durables.
¿Qué esperar los siguientes días?...
En Estados Unidos, esta semana destacan datos del sector residencial. El consenso de analistas anticipa contracciones de 0.8% y de 1.8% a tasa mensual en los permisos de construcción y en los inicios de vivienda de noviembre, respectivamente. Asimismo, se estiman caídas de 5.2% m/m en las ventas de casas existentes y de 5.1% m/m en las ventas de casas nuevas del mes.
En lo que respecta a inversión no residencial, el mercado prevé una caída de 0.5% a tasa mensual en los nuevos pedidos de bienes durables de noviembre. Excluyendo transporte, la estimación para el crecimiento de los nuevos pedidos se ubica en 0.0% m/m. Asimismo, se anticipa una caída de 0.4% a tasa mensual en el índice de indicadores adelantados de noviembre. En general, los datos apuntan a que la economía norteamericana podría caer en algunos trimestres del próximo año.
Un dato importante será el deflactor del gasto en consumo, la medida de inflación preferida por la FED. El consenso estima tasas anuales de 5.8% y 4.6% para los deflactores general y subyacente en noviembre (6.0% y 5.0% en octubre). Finalmente se esperan 215 mil solicitudes iniciales del seguro de desempleo para la semana laboral que concluyó el 17 de diciembre.
En cuanto a China, el banco central podría mantener la tasa de interés de referencia en 3.65%. En la Eurozona se conocerán cifras de gasto en construcción y confianza del consumidor a noviembre y diciembre, respectivamente.
En México destaca la inflación de la primera quincena de diciembre. El estimado de INVEX para las variaciones quincenales de los índices general y subyacente se ubican en 0.50% y 0.62%, respectivamente. Para fin de año, estimamos variaciones anuales de 8.00% y 8.36%, respectivamente. Es poco frecuente que la inflación subyacente rebase a la general tal y como ocurrió en este 2022.
Los bancos centrales continúan en su lucha contra la inflación y el mercado se muestra temoroso sobre el impacto en la economía.
La tendencia general de las bolsas fue negativa la semana pasada. El S&P 500 de Estados Unidos bajó (-) 2.1%, destacó la caída del (-) 3.6% del sector de Consumo discrecional, el único sector que operó positivo fue Engería con un avance de 1.7% en la semana.
El Stoxx Europe 600 retrocedió (-) 3.3%, el Nikkei de Japón (-) 1.3% y el Hang Seng de China bajó por primera vez en dos semanas.
El evento de la semana fue las decisiones de política monetaria alrededor del mundo. No hubo sorpresas; se reitera el mensaje de una moderación en el ritmo de alza en las tasas de interés; pero, sin ver por ahora un cambio en una política restrictiva ante los retos que sigue implicando la inflación. Los bancos centrales acompañan estos movimientos con recortes en sus estimaciones de crecimiento y advertencias de un escenario económico complejo en el corto plazo.
El FED subió la tasa de interés de referencia en 50 puntos base (en línea con las expectativas del consenso); sin embargo, se reitera un mensaje que no es del todo grato para los mercados de capitales: aún queda camino por recorrer en el control de la inflación.
El banco central proyecta una tasa terminal mayor a 5.0% en 2023 y recortó sus estimados de crecimiento para la economía de Estados Unidos el próximo año.
Con ello, si bien un dato de inflación mejor al esperado al inicio de la semana dio cierto espacio para que las bolsas ganaran tracción; confirmarse el escenario de tasas de interés elevadas en el corto plazo y un menor dinamismo económico en los próximos meses volvió a generar cautela en el mercado.
El BCE actuó de forma similar, subió sus tasas de interés de referencia en 50 puntos base y anunció que comenzará a reducir su balance de activos a partir de 2023. Previo a su decisión de política monetaria, el organismo señalaba que la inflación se podría mantener por encima de su objetivo del 2% durante los próximos tres años.
El Banco central de Inglaterra elevó la tasa de interés por novena vez a 3.5%, su nivel más alto en 14 años; señaló que Reino Unido entra en una larga recesión y los analistas del gobierno pronosticaron una reducción récord del nivel de vida.
Banxico en México hizo lo propio en una decisión dividida, subió su tasa de referencia en 50 puntos base. Existen cuestionamientos respecto a si el organismo se despegará o no del actuar del FED, por lo pronto no ha sido así, y los niveles de tasas de interés en máximos históricos seguirán siendo un factor de presión en la valuación del mercado en el corto plazo.
Hubo poca información adicional que asimilar, en jornadas en donde seguimos viendo a los mercados de capitales un tanto cansados. Las noticias positivas dan un impulso contenido y las correcciones son moderadas. El S&P 500 intenta regresar a los 4,000 puntos, un nivel que, como hemos señalado en otras publicaciones, es el objetivo de cierre de año de la mediana del consenso de analistas de Bloomberg no sólo para este año, sino también para el próximo.
El panorama para la renta variable en este sentido sigue sin ser demasiado favorable. No logra concretarse un impulso de cierre de año como hemos visto en otras ocasiones: en el promedio de los últimos diez años el S&P 500 subió en diciembre cerca de 2.0%, y en este lapso logró rendimientos positivos en siete ocasiones. Hoy vemos que el referente pierde casi (-) 5.5% en el mes.
El mercado local se vio contagiado de esta aversión al riesgo a nivel global: el S&PBMV IPC cerró la semana por debajo de los 50,000 puntos. Fue relevante el desempeño en el segmento de telecomunicaciones: se confirmó que TLEVISA hizo una oferta para comprar a MEGA; sin embargo, esta última declaró que no había aceptado la propuesta. MEGA mantuvo impulso en la semana, pero TLEVISA no logró ganar tracción.
La noticia genera presión al mercado desde el punto de vista competitivo, un factor que parece estar detrás del castigo que sufren ambas empresas en el mercado accionario (entre otras cosas) ante los retos que implicará para la rentabilidad y las inversiones de capital el plan agresivo que persiguen ambas por ganar participación de mercado.
Pero, más importantes fueron las bajas en el sector minero, PEÑOLES perdió (-) 8.7% y GMEXICO (-) 7.2% en la semana.
A unos días de finalizar el año las expectativas del consenso son bastante dispares: el consenso de la AMIB fija un promedio para la cotización del S&PBMV IPC el 31 de diciembre de 51,126 unidades (un upside de 3.0% respecto al cierre del viernes). Pero hay analistas que fijan estimados muy optimistas de 57,900 unidades, mientras que el nivel de 48,800 es el más pesimista. Nuestra expectativa es de un nivel de 51,000 puntos.
Desempeño semanal de las bolsas
Cierre | Var. Semanal | |
S&PBMV IPC | 49,630 | -1.66% |
Dow Jones | 32,920 | -1.66% |
Nasdaq | 10,705 | -2.72% |
S&P500 | 3,852 | -2.08% |
Bovespa | 102,856 | -4.34% |
DAX | 13,893 | -3.32% |
CAC 40 | 6,453 | -3.37% |
Nikkei | 27,527 | -1.34% |
Shangai | 3,168 | -1.22% |
¿Qué esperar en los próximos días?
Serán jornadas de menor actividad en el mercado y con un flujo acotado de información económica. Dentro de la agenda económica destaca en Estados Unidos la confianza del consumidor de diciembre, bienes de órdenes durables e indicadores de vivienda de noviembre, las peticiones iniciales de desempleo de ambas semanas, Así como el PIB del 3T-22.
En China destacan indicadores de actividad del sector privado, con una lectura prevista para el PMI de fabricación en diciembre de 49 unidades vs. 40 previas (aún por debajo del umbral que implica expansión).
En México se espera el dato de la inflación a la primera quincena de diciembre y la tasa de desempleo de noviembre.
Tasas y tipos de cambio
Opinión Estratégica de Deuda y Tipo de Cambio
La semana anterior se dio la decisión de política monetaria por parte de la Reserva Federal, así como la actualización de los estimados macroeconómicos y la gráfica de puntos. En línea con lo esperado y que ya se había telegrafiado por parte de la Fed, se dio un incremento en la tasa de referencia más moderado a los últimos realizados. Se dio aumento de 50 puntos base para colocar la tasa de referencia en el rango entre 4.25%-4.50%.
Por su parte, pensamos que todo el ejercicio de comunicación del banco central norteamericano mostró un tono aun restrictivo. El detalle más relevante es que la FED dejo claro que seguirá subiendo la tasa de referencia, los riesgos sobre la inflación se mantienen y esto se vio reflejado en un incremento de las expectativas de la tasa de referencia plasmadas en la gráfica de puntos. Con esto, para 2023 la tasa se ubicaría por arriba del 5.0%. A este ritmo de alza habría por lo menos dos más de 50 y 25 puntos base respectivamente, pero será dependiente de los datos.
Vimos una reacción del mercado contraintuitiva al tono más restrictivo de la Fed. Los Bonos del Tesoro en la referencia de 2 años operaron cerraron sobre 4.17%, 18 puntos base menos que el cierre semana previo; para el vencimiento de 10 años el cierre semanal se dio sobre 3.47%, con 10 puntos menos en la semana.
En México, la Junta de Gobierno por mayoría del Banco de México decidió incrementar la tasa de Interés de referencia en 50 puntos base (pb) para ubicarla en 10.50%. Se dio el voto disidente del subgobernador Esquivel a favor de un alza de sólo 25 pb. En el comunicado, Banxico considera pertinente volver a incrementar la tasa de referencia en la próxima reunión. Asimismo, mantiene un balance de riesgos para la inflación sesgado al alza.
En la primera reunión del 2023, si la FED vuelve a incrementar la tasa en 50 puntos base Banxico volverá a replicar el movimiento en la tasa de interés de referencia. Sobre todo, también, si la inflación subyacente no da señales a la baja en las próximas semanas e incluso existe el riesgo de extenderse el ciclo restrictivo; si es que no se da evidencia suficiente de que la inflación subyacente este en franca desaceleración. El escenario central es que el nivel terminal estará entre 10.75%-11.00% para la tasa de interés de referencia y se mantendría ahí todo el 2023.
Con esto, los Mbonos en el vencimiento a 3 años la referencia cerró sobre 8.91 %, 22 puntos base de baja con respecto al previo semanal. Mientras que el cierre del vencimiento a 10 años terminó en 8.93%, con una baja de 11 puntos base a lo largo de la semana.
En cuanto al tipo de cambio, el rango de operación se mantuvo entre $19.60 a $19.90 pesos por dólar durante la semana. El recorrido del tipo de cambio llevó al dólar a un cierre alrededor de los $19.81 pesos. En la semana se dio cierta estabilidad dentro del rango descrito, dado lo cercano de las decisiones de política monetaria entre México y los Estados Unidos, lo que permitió que prácticamente no hubiera desface en el diferencial de tasas, como se dieron en episodios anteriores.
Deuda Corporativa
FSHOP: HR mantiene la calificación de AA– de las emisiones de Certificados Bursátiles de Fibra Shop, aunque modificó la Perspectiva de Negativa a Estable, debido a la estabilidad esperada en la generación de Flujo Libre de Efectivo para el periodo proyectado de 2022-2027, asociado a mejores resultados operativos que fueron impulsados por mayores factores de ocupación. Sin embargo, por el lado negativo aun tiene altos niveles de apalancamiento ya que su deuda neta / Ebitda se encuentra ligeramente por debajo de 9.0x
Opinión: Positivo
Pues la calificadora señala que la estabilidad y calidad del portafolio de Fibra Shop formado por 17 centros comerciales tienen un alto factor de ocupación e integrado por una base sólida de clientes. Además, de que cuenta con capacidad de financiamiento. Los niveles de factor de ocupación que actualmente tiene llegan a 93.5%, cuando en la pandemia llegaron a bajar mucho y colocaron en mayores niveles de riesgo de baja de calificación a sus emisiones. En la actualidad, la empresa tiene tres Certificados Bursátiles en el mercado de deuda local , dos de tasa fija nominal y uno de tasa flotante.
Tasas Estados Unidos
|
Tasas México
|
Tipo de Cambio
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario